Lagarde citó entre esas amenazas la volatilidad de los mercados, los flujos de capitales, las transiciones económicas y monetarias de varios países, la caída de los precios de las materias primas y las tensiones geopolíticas que han provocado un aumento de los refugiados en Europa «Hay trabajo por hacer», resumió la directora gerente del Fondo, que anunció que la institución que encabeza estudiará en las próximas semanas los «espacios» que cada país tiene para tomar medidas.