Trabajo revisa la situación laboral de 250 empleados de hogar gallegos

Gabriel Lemos REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

PACO RODRÍGUEZ

Solo se han detectado infracciones en una de cada diez inspecciones realizadas

26 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Con hasta un 40 % de empleo sumergido en el sector, según las estimaciones de los sindicatos, la Inspección de Trabajo y de la Seguridad Social ha puesto la lupa en la situación laboral de los empleados domésticos. En concreto, en el caso de la jefatura territorial en Galicia, el organismo fiscalizador ha realizado este año más de 250 comprobaciones en otros tantos hogares de la comunidad para verificar la situación laboral de los empleados domésticos.

Según los datos aportados a La Voz por la Consellería de Economía, Emprego e Industria, que participa junto al organismo estatal en un plan conjunto de lucha contra el empleo sumergido, tres cuartas partes de esas inspecciones se centraron en cuestiones relacionadas con la cotización de los empleados domésticos, así como en los trámites de altas y bajas en la Seguridad Social. Sin embargo, solo en el 12,6 % de estas actuaciones, menos de una treintena del total (con datos actualizados hasta la primera quincena de diciembre), se detectaron incumplimientos susceptibles de sanción económica.

Cambio de régimen

Y eso a pesar de que los cambios introducidos en materia de cotización social de estos trabajadores en el 2011, en el último Consejo de Ministros del Gobierno Zapatero, no han conseguido aflorar, ni de lejos, todo el empleo oculto en el sector. Así, según los datos recogidos del Instituto Galego de Estatística, el sistema especial de empleados de hogar integrado dentro del régimen general de la Seguridad Social contabilizó en noviembre una media de 27.531 afiliados en la comunidad, un 0,1 % por debajo de los registrados en el mismo mes del año anterior. De hecho, desde principios del 2013, una vez finalizado el proceso de transición del régimen especial de empleados domésticos al nuevo sistema -y materializados los cambios introducidos por el actual Ejecutivo, que relajó las obligaciones de los empleadores y elevó las bases de cotización-, el número de trabajadores de hogar dados de alta como cotizantes se ha mantenido sin variaciones en el entorno de los 27.000 afiliados. Supone un incremento del 36 % respecto a los que había dados de alta en diciembre del 2011, cuando el antiguo régimen de cotización contaba con 20.242 inscritos. Sin embargo, los siete mil empleos aflorados son pocos si se comparan con los cerca de 40.000 empleos que, según un estudio realizado por Comisiones Obreras antes de la crisis, había ocultos en la comunidad en este sector.

Lo mismo sucede en España donde los sindicatos estiman en más de 700.000 el número real de trabajadores domésticos, frente a los 430.000 que están dados de alta actualmente.

Dentro de la lucha contra la precariedad laboral en el sector, Comisiones Obreras presentó a finales de noviembre en el Ministerio de Empleo las más de diez mil firmas recogidas para exigir la ratificación del convenio de la Organización Internacional del Trabajo para las empleadas de hogar, que busca acabar con situaciones de «semiesclavitud».