El comercio gallego es de los que más crecen en España y prevé la mejor Navidad poscrisis

m. sío dopeso, r. Santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Oscar Vazquez

Las ventas de octubre subieron un 6,9 %, alentadas por la percepción de mejora de la economía

01 dic 2015 . Actualizado a las 08:46 h.

A pie de calle, la euforia de ventas que reflejan las estadísticas no acaba de llegar a los balances de caja de los pequeños comercios gallegos. El consumo ha mejorado, pero el sector sigue sin creerse que su volumen de negocio sea el que más crece de España, según los datos del INE, que otorgan a Galicia un repunte interanual de la facturación del 6,9 % en octubre, solo por detrás de Baleares (7,6) y muy por encima de la media española (4,8).

El buen dato de octubre se enmarca en una tendencia de recuperación de los pequeños negocios, que comenzó un poco más tarde que en la mayoría de las comunidades (las ventas en Galicia aún caían a finales del 2014), pero que acumula ya diez meses de repunte.

El resultado es que, en lo que va de año, el negocio del pequeño comercio gallego ha crecido un 4 %, la cuarta mayor alza en España (solo por detrás de Valencia, Baleares y Cantabria); y que es además la mayor tasa de crecimiento de las ventas minoristas en la última década.

¿Y por qué los comerciantes no tienen la sensación de que las cosas van tan bien como pintan las estadísticas? Todo tiene una explicación, que se sitúa a medio camino entre los datos oficiales y las cajas registradoras. La clave está en el punto de partida. «Estábamos en el sótano. Y aunque venimos registrando cifras de crecimiento desde hace 6 o 7 meses, y esa parece que va a ser la tendencia, los negocios no se han recuperado porque en los años anteriores perdimos más de un 40 % de facturación», afirma José María Seijas, presidente de la Federación de Comercio de Galicia.

Los analistas también interpretan este llamativo repunte de las ventas con perspectiva y cautela. «Es un dato muy bueno, sin ninguna duda, pero hay una realidad: es más fácil crecer cuando partes de más abajo», afirma Santiago Lago, director del Foro Económico de Galicia. Para el economista, es evidente la mejoría del sector en la comunidad y da una explicación: «El consumo estaba muy deprimido en Galicia porque los índices de confianza estaban por debajo de la media española. Esa percepción ha mejorado y se refleja en las ventas», afirma.

Ánimo levantado

En la misma línea, el economista Venancio Salcines opina que el repunte espectacular de las ventas tiene su explicación en unos años de gran retroceso: «Es un crecimiento porcentual y nosotros arrancamos de un punto más bajo que otras comunidades. Al partir de un listón más bajo, el incremento es más llamativo».

En todo caso y con las debidas reservas, el sector se muestra con el ánimo levantado, sobre todo después del éxito de las dos campañas de descuentos: el black friday este fin de semana y el ciber monday de ayer para los productos informáticos.

«Se notó el impacto en las ventas, la gente anticipó compras y nos ha ayudado a sacar muchos artículos, pero por mucho nombre anglosajón que le quieran poner, no dejan de ser las rebajas encubiertas de noviembre de toda la vida», afirma Seijas. El presidente de los comerciantes gallegos reconoce que el sector se muestra optimista y coincide con las grandes organizaciones del comercio en España a la hora de vaticinar la mejor Navidad desde el comienzo de la crisis.

La asociación multisectorial de fabricantes y distribuidores AECOC destacó ayer el «gran volumen de ventas especialmente en el apartado del electrodoméstico» registrado desde el viernes hasta ayer, mientras que la Confederación Española del Comercio anticipa que «tras tres temporadas de black friday, este se ha consolidado como el arranque de la campaña navideña».

«Las ventas se han duplicado con respecto al año pasado», destaca la Asociación Empresarial del Comercio Textil y Complementos. Pero no solo se ha vendido ropa, calzado o electrodomésticos. Durante el black friday se despacharon en España 7.564 coches, un 23,5 % más que el día anterior, según la patronal Anfac.

Los efectos positivos de estas rebajas también se trasladaron al comercio on-line, con cifras récord para Amazon. Su portavoz en España, Adam Sedó, confirmó ayer que la compañía batió sus registros históricos, con 560.000 encargos el viernes, a una media de 392 pedidos al minuto.

El repunte de los negocios no se traslada a la creación de empleo

Los pequeños comercios gallegos llevan diez meses incrementando las ventas, pero esa mejoría no se traslada a un repunte de plantillas. Según el INE, mientras la facturación ha crecido un 6,9 % en octubre, el empleo apenas ha registrado un ligero incremento del 0,6 %. Si las cosas van mejor y hay más actividad, ¿por qué no se crean más puestos de trabajo?

La respuesta está en la propia estructura de los negocios. «No crecemos, simplemente nos mantenemos. Durante estos años se han cerrado muchos comercios, pero los que se mantienen conservan a sus trabajadores porque es un empleo sano, de pocas contrataciones, pero duraderas. No ocurre como en otros canales que hacen un contrato hoy y despiden en enero», explica José María Seijas, que, en todo caso, sí considera que algo de empleo se está creando, aunque de forma lenta.

El economista Venancio Salcines opina que la clave de que los pequeños comercios gallegos no generen nuevos puestos de trabajo está en el carácter familiar de la mayoría de ellos. «Hay mucha pequeña empresa familiar que ha aguantado el tirón y ha seguido cotizando, en muchos casos, sin generar beneficios», afirma. Esta situación de dificultad se ha prolongado demasiado tiempo y ha provocado el endeudamiento de muchos negocios. «Con los primeros brotes de vida, el comercio minorista gallego lo primero que está comenzando a hacer es desapalancarse y cubrir las deudas adquiridas. Son los primeros pasos, antes de invertir y crear puestos de trabajo», sostiene.

La situación es extrapolable a lo que ocurre en el conjunto de España. El empleo en el comercio minorista aumentó un escaso 1,3 % en octubre. Encadena así 18 meses consecutivos de repuntes en materia de contratación, pero de forma muy lenta.