El kilo de porcino baja de 1 euro por primera vez en un lustro. ¿La razón? Exceso de producción y ralentización del consumo
19 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El sector ganadero gallego atraviesa uno de los peores momentos de su historia reciente. Si especialmente delicada es la situación de los productores lácteos, no mucho mejor lo están pasando aquellos que crían carne de vacuno -los precios han caído del orden de un 20 % en los últimos meses- o los que mantienen conejos y cerdos.
De hecho, más de 2.000 granjas porcinas y otras 250 cunicolas ubicadas en la comunidad tienen seriamente condicionada su continuidad debido a los bajos precios que reciben por la materia prima que producen. Cotizaciones que, en el caso de la carne de cerdo, han bajado por primera vez en el último lustro del euro por kilo lo que está obligando a la mayoría de las explotaciones a vender a pérdidas.
«A rendabilidade deste sector xa nunca foi moi elevada e ahora é totalmente inexistente. Con prezos que nin sequera chegan ao euro en determinadas variedades resulta imposible sequera cubrir custos de producción», apunta un productor porcino del municipio coruñés de Abegondo.
Las cotizaciones
Las últimas cotizaciones de la Lonja de Mercolleida -el principal indicador del porcino a nivel nacional- apuntan a precios para el cerdo cebado de 0,98 euros por kilo. Situación que se repite en la lonja agropecuaria de Silleda que, en la sesión del martes, fijó cotizaciones de 0,97 euros por kilo para el porcino cebado de categoría normal, de 0,995 euros para el selecto y de 1,260 euros para el considerado como canal II.
Exceso de producción
Detrás de la situación de crisis que atraviesa el porcino se encuentra la confluencia de dos factores determinantes. Por un lado, un aumento interanual de la producción que el propio Ministerio de Agricultura cifra en algo más del 4 % -en el caso del cebo, el porcentaje de incremento supera el 6 %- y, por otro, cierta ralentización del consumo, que llega cuando el sector parecía haberse recuperado de las consecuencias provocadas por el veto ruso a la entrada de carne procedente de la UE.
En el caso del conejo, los criadores apuntan directamente a los intermediarios y a las cadenas de distribución como culpables de su actual situación. Se quejan de la utilización como producto reclamo de la carne que producen y de que el dinero que genera la cadena valor de la materia prima se queda en manos de terceros. Mientras ellos perciben 1,55 euros por cada kilo que ponen en el mercado (les cuesta 1,85 producirlo) el consumidor lo paga en el supermercado por encima de 5,25 euros.
El sector porcino gallego cuenta con algo más de 25.000 explotaciones -solo el 10 % son granjas industriales-, un tercio de las que se registran en el conjunto del país. Pese a esto apenas consiguen poner en el mercado un 2 % de toda la producción nacional o, lo que es lo mismo, sobre 78.000 toneladas el año pasado. En este sentido, el principal reto del sector porcino gallego, según apuntan desde la Federación Galega de Porcino (Fegapor) pasa por buscar alternativas de mercado para el 40 % de la producción cárnica que no es capaz de absorber el mercado interno.
Segundos en conejos
En el caso del sector cunícola, el volumen anual de sacrificio se sitúa en algo más de 6,5 millones de cabezas, que consolidan a Galicia como la segunda comunidad española productora de carne de conejo del país, solamente superada por Cataluña.
Pese a ello, el sector sigue teniendo un peso reducido en la renta final agraria debido, fundamentalmente, al escaso rendimiento que obtienen las granjas. Actualmente hay censadas en la comunidad un total de 307 explotaciones destinadas a la producción y comercialización de carne de conejo.