La CEOE pide menos impuestos y contratos aún más flexibles

g. l. REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

En sus propuestas al próximo Gobierno pide que se eliminen las tasas medioambientales autonómicas

08 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

A dos meses y medio de las elecciones generales que, si no hay cambios en el calendario anunciado por Rajoy, se celebrarán el 20 de diciembre, las patronales CEOE y Cepyme presentaron ayer un documento con sus propuestas para el Gobierno que salga de esos comicios, bajo el título Quince reformas para consolidar la recuperación.

Una carta a los Reyes Magos en la que las organizaciones empresariales vuelven a poner encima de la mesa sus grandes reivindicaciones, como una mayor flexibilidad del mercado laboral. Para ello, piden simplificar la contratación reduciendo el número de modalidades de contratos -aunque a renglón seguido proponen crear uno nuevo específico para las empresas de trabajo temporal y otro para jóvenes, con menos derechos- o eliminando el tope de tres años en los de obras y servicios, al tiempo que reclaman de nuevo un abaratamiento de las indemnizaciones por extinción de contrato indefinido y que el Gobierno vuelva a subvencionar, a través del Fogasa, los despidos por causas objetivas en las empresas de menos de 25 trabajadores. El organismo se hacía cargo, hasta el 2014, de parte del pago (ocho de los veinte días por año trabajado), que ahora solo abona en caso de insolvencia de la firma.

En materia tributaria, los empresarios abogan por «coordinar de manera urgente las políticas tributarias estatales, autonómicas y locales», para lo que piden suprimir la práctica totalidad de los casi cien impuestos propios (la mayoría tasas medioambientales) que cobran las comunidades. Para avanzar en la unidad de mercado, reclaman «normas claras, sencillas, comprensibles y en un número reducido, eliminando distorsiones y reduciendo las cargas administrativas desproporcionadas en un 30%».

Pero hay más. Los empresarios quieren que los principales partidos alcancen de una vez un gran «pacto social por la educación» para evitar los continuos cambios de leyes y mejorar la calidad de la enseñanza. Y aprovechan para reclamar más peso para los centros privados y la externalización de servicios complementarios.

No es el único pacto de Estado que reclaman. Piden otro para la reindustrialización del país, de forma que el sector aumente su peso en el PIB al menos al 20 %, para lo que ven imprescindible una rebaja en el costes de la energía.