Y al quinto día, fin del bloqueo

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Los ganaderos volvieron a entregar la leche a las fábricas y hoy tienen previstas concentraciones ante los supermercados que no han confirmado alzas de precios

17 sep 2015 . Actualizado a las 10:19 h.

Los tractores que bloqueaban las industrias lácteas desde el pasado sábado recibieron ayer instrucciones para que, a partir de las seis de la tarde, empezaran el regreso a casa de forma ordenada. La indicación partió de la Plataforma en Defensa do Sector Lácteo, cuyos representantes comparecieron públicamente para informar de que quedaba también desconvocada -al quinto día- la huelga de entregas. Pero no las movilizaciones, que se trasladan hoy mismo a la distribución.

Las cisternas de las lácteas salieron poco después a recoger la leche acumulada en los tanques de las granjas, y por las carreteras empezaron a verse camiones de Feiraco o Lactalis.

La decisión no satisfizo a algunos los ganaderos apostados frente a las empresas, que querían seguir allí hasta conseguir un compromiso por escrito. A la planta de Puleva, en Nadela, perteneciente al grupo Lactalis, tuvo que desplazarse en persona Román Santalla, responsable de ganadería de Unións Agrarias, para explicar los motivos de las desmovilización. El malestar por la medida también se hizo patente entre los ganaderos de Ferrolterra, Eume, Ortegal y Ordes, que bloqueaban el acceso a la planta de Celta en Pontedeume, y que accedieron finalmente a marcharse para continuar presionando a la distribución. Esta mañana arrancarán los tractores con destino a la sede central de Gadisa en Betanzos, una empresa, gallega, que no se ha manifestado en toda esta crisis.

También iniciaron la marcha los movilizados ante las factorías de la zona de Arousa. Y en Melide. La plataforma -comparecieron Román Santalla, de Unións Agrarias y Manuel Iglesias, el presidente de la OPL- justificó el levantamiento del bloqueo de las industrias y el fin de la huelga de entregas argumentando que habían conseguido que aceptaran cuatro puntos propuestos en el documento que se firmará la semana próxima en Madrid, y cuyo cumplimiento vigilarán. Son la derogación de los contratos a la baja presentados por las industrias en las últimas semanas, con nuevas rebajas en los precios; la entrada en vigor el 1 de octubre de los nuevos contratos, con un modelo único para todas las industrias; la aplicación de un índice de costes de producción (dan por bueno que la referencia sea la Inlac); y la puesta en marcha de un decreto con capacidad sancionadora para quienes incumplan.

La plataforma lanzó un aviso a industrias y distribuidoras francesas ante la falta de respuesta a sus requerimientos sobre la subida de precios. «A partir de agora -señaló Santalla- nós imos establecer a forma de traballar neste país, non os franceses». Allí, dijo, los ganaderos también hacen huelgas de entregas «coa diferenza de que con eles negocian e chegan a acordos e aquí actúan con silencios e ameazas».

No citaron nombres pero el aviso a la industria francesa iba claramente dirigido a Lactalis, que en la jornada anterior denunció ante la Guardia Civil el bloqueo de su planta de Vilalba. Los agentes se desplazaron hasta la fábrica y anotaron los nombres de los concentrados y las matrículas de los vehículos.

Esta fase del conflicto, con el fin de la huelga de entregas, finaliza con una profunda división entre los ganaderos gallegos, escenificada por primera vez en Lugo mediante la ruptura con los sindicatos. La plataforma no abandona la presión. En estas nuevas acciones ante la distribución utilizarán también los tractores.