El bloqueo a la industria, sin precedentes, empezaba a provocar desabastecimiento

Mario Beramendi Álvarez
mario beramendi SANTIAGO / LA VOZ

ECONOMÍA

CÉSAR TOIMIL

Hay queserías paralizadas y marcas gallegas, como Leyma y Feiraco, fuera de los lineales de venta de algunos supermercados

17 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Cinco días de bloqueo a las industrias lácteas que a muchos se les ha hecho eterno, como ganaderos que han perdido a lo largo de estas jornadas entre 15.000 y 20.000 euros en leche. Y una cadena de valor completamente paralizada, que ha afectado en gran medida a la industria radicada en Galicia; el resto ha podido traer briks de fuera y reponer en los lineales de venta. Pero en empresas como Leche Río, por ejemplo, la situación hizo ayer encender todas las luces rojas.

Su propietario, Jesús Lence, aseguraba por la mañana que en leche fresca de la marca Leyma, con una producción de 50.000 litros diarios en la planta de Arteixo, ya existía desabastecimiento en los lineales de venta de hipermercados y supermercados, y en muchas cafeterías de la comunidad. «Esperamos que puedan salir pronto a distribuirla porque ya existe desabastecimiento», explicaba el empresario.

Otro tanto ha ocurrido con la actividad de las queserías, que precisan de producto fresco para su pleno funcionamiento, muchas de las cuales estaban ayer al límite. Entrepinares, con una planta en Vilalba (Lugo) y que es un proveedor exclusivo de la cadena de distribución Mercadona, estaba ayer completamente parada al no disponer de materia prima fresca. «Si no entra leche aquí no se podrá trabajar en los próximos días para fabricar queso», explicaban fuentes conocedoras.

Parte de los gestos para revalorizar la leche lanzados el pasado lunes por industrias y distribución iban encaminados, precisamente, a evitar que se pudiera llegar a ese punto. Con una producción diaria estimada en unos siete millones de litros, las pérdidas por cada jornada de bloqueo suman unos 4,2 millones de euros. Es decir, en cinco días de movilizaciones, el sector ha dejado de ingresar más de 20 millones de euros. Y con los productores, primer eslabón de la cadena de valor, como la parte más damnificada. De hecho, han sido voces, dentro de los propios ganaderos, conscientes de las pérdidas acumuladas, los que presionaron para levantar un bloqueo ante la insostenibilidad de su situación.

Uno de los que más ha sufrido las consecuencias de las movilizaciones ha sido Feiraco, la cooperativa láctea más grande de Galicia. Desde sus instalaciones en Negreira (A Coruña) no ha salido un solo camión con leche desde el sábado. Y en puntos de venta de la capital gallega, por ejemplo, había ayer desabastecimiento de sus cartones, lo mismo que los de otra gallega, Larsa.