Los cotizantes vuelven al nivel del 2011, pero aportan 700 millones menos a las arcas del Estado

Mario Beramendi Álvarez
m. beramendi SANTIAGO / LA VOZ

ECONOMÍA

MARCOS MÍGUEZ

El empleo se está generado sobre sectores de poco valor añadido bruto por ocupado, sujetos a la estacionalidad, lo que aleja cualquier expectativa a corto plazo de cambio de modelo productivo

04 jun 2015 . Actualizado a las 16:39 h.

Los datos de empleo divulgados este semana han servido al Gobierno de Mariano Rajoy para recordar que los niveles de afiliación han vuelto al mismo lugar que dejó Zapatero cuando abandonó la Moncloa en el 2011: 17,2 millones de cotizantes. Una cifra que evidencia que el ritmo de recuperación del mercado de trabajo toma un nuevo impulso. Sin embargo, esto tiene su envés: lo que recauda ahora la Seguridad Social con un volumen similar de cotizantes es mucho menos.

Los números que ofrece el Ministerio de Empleo muestran que entre enero y abril del 2011, cuando aún gobernaba el PSOE, se ingresaron en concepto de cotizaciones 17.072 millones de euros. Si se analiza el mismo período de este año, los cuatro primeros meses, la recaudación baja hasta los 16.392 millones. Es decir, que con un volumen similar de afiliados, el Estado ha ingresado en el primer cuatrimestre casi 700 millones de euros menos, lo que equivale a un descenso del 4 %. Si se mantuviera esta proporción a lo largo del año la cifra se elevaría hasta los 2.800 millones de euros menos de ingresos. Esta merma en la caja de la Seguridad Social se ha producido en un contexto en el que se han disparado los gastos de un país profundamente envejecido, en el que la relación entre cotizantes y jubilados se acerca cada vez.

Detrás del hecho de que haya una menor recaudación en cotizaciones sociales hay varias razones. Las bases se han reducido por la bajada de sueldos propiciada por la recesión y por la posterior reforma laboral. Y, sobre todo, por el auge de contratos a tiempo parcial a lo largo de estos años. Y especialmente, en este período de salida de la crisis.

El empleo se está generado sobre sectores de poco valor añadido bruto por ocupado, sujetos a la estacionalidad, lo que aleja cualquier expectativa a corto plazo de cambio de modelo productivo. El impulso a la contratación del pasado mes de mayo tiene que ver con los empleos temporales de la campaña de verano.

A esto se suma que quienes salen del sistema (esto es, los nuevos jubilados) aportaban a las arcas en concepto de cotizaciones mucho más que las personas que se incorporan como nuevos afiliados. La recaudación ha bajado también por las medidas de incentivación a la contratación (con tarifas planas en cotizaciones).