Es Europa la que impuso la actualización del IVA sanitario, recuerda Luis del Amo Carbajo, secretario técnico del Registro de Asesores Fiscales del Consejo General de Colegios de Economistas de España.
-¿Por qué esta corrección del IVA sanitario al21 %?
-A raíz de una directiva europea que marca los cambios. De todas formas se mantiene la reducción para algunos productos necesarios, como gafas o prótesis.
-¿Es habitual el tirón de orejas de la UE?
-Sí, pasa en otras cuestiones a menudo. Se corrige porque no se adecúa a la directiva europea. Ha sucedido en bastantes países.
-De todas formas, lo que exige la directiva es atenerse al tipo general, cuyo mínimo admitido, según Europa, es el 15 %, no el 21.
-Sí, pero hasta no hace mucho estaba en el 16 %, porque nuestro tipo general ha ido subiendo para situarse, más o menos, en la media europea. Hay países en el 23 % e incluso más. De hecho se nos ha reclamado tradicionalmente el trasvase de muchos productos con IVA reducido al general, con el argumento de que nuestro país es de los que menos recauda por IVA en relación al PIB.
-¿En qué casos estamos por debajo de Europa?
-Por ejemplo, en restauración hay muchos países con un tipo superior a nuestro 10 %. Se nos achaca eso. Algunos economistas dicen que en España habría que aumentar la recaudación por la vía del IVA, pero la realidad es que si pasas el pan del 4 al 21 % tienes un problema social. Hablar es fácil, pero cuando ves realmente lo que hay no te atreves con el turismo, con los medicamentos...
-¿Cómo evolucionará el IVA?
-La recomendación de los expertos para la reforma fiscal iba por la vía de subir todos los tipos a cambio de rebajar las cotizaciones sociales. De esta manera deprecias las exportaciones, exentas de IVA, encareces las importaciones y abaratas el trabajo. En suma, consigues un efecto parecido a una devaluación. Algunos preconizan la subida de todos los tipos, más que un trasvase de productos.
-Se evitan así odiosas comparaciones, como los pañales al 21 %, por encima de la media europea.
-Claro, pero ahí dirán los fiscalistas que eso se debe corregir a través del IRPF, por ejemplo con ayudas a la maternidad.