La lluvia de millones del BCE intensificará la guerra por las hipotecas

Efe

ECONOMÍA

KAI PFAFFENBACH | Reuters

El programa de compra de deuda aportará oxígeno a los balances de los bancos y propiciará una reactivación de este negocio

24 ene 2015 . Actualizado a las 11:38 h.

La lluvia de millones que regará a partir de marzo la economía europea gracias al programa de compra de deuda anunciado esta semana por el Banco Central Europeo (BCE) tendrá previsiblemente un importante efecto en España: contribuirá a intensificar la guerra hipotecaria que libra ya la banca nacional.

El programa, anunciado el jueves por el presidente de la entidad, Mario Draghi, consiste básicamente en que el BCE comprará en torno a 60.000 millones de euros mensuales en deuda pública y privada entre marzo del 2015 y septiembre del 2016, lo que incluye la adquisición de bonos soberanos españoles por valor de unos 5.300 millones de euros. Según los expertos, esa cantidad aportará oxígeno a los balances de los bancos, casi asfixiados después de haber tenido que buscar capital hasta debajo de las piedras para cumplir con los mínimos regulatorios y aprobar las últimas pruebas de estrés conocidas en noviembre.

La crisis y el cierre de los mercados que ésta trajo consigo hicieron que la banca española casi tuviera que abandonar la concesión de hipotecas en los últimos años, una actividad que ahora retoman con alegría, ya que es bastante lucrativa. Y es que, para conceder uno de estos préstamos, las entidades exigen, entre otros requisitos, la domiciliación de la nómina, auténtica mina de oro para la banca por su componente transaccional y porque atrae incluso el ahorro de muchos clientes, que consideran más sencillo trabajar con una sola entidad.

Ahora, la mejora económica y la caída de los precios de la vivienda, además de una actitud más abierta de la banca a la hora de conceder hipotecas propician la reactivación de este negocio, a lo que sin duda ayudará la facilidad que supone el dinero fresco que inyectará el BCE. Y, además, los datos económicos acompañan por primera vez en siete años, entre ellos la mejora del paro y, por consiguiente, de la morosidad, por lo que las entidades pueden aprovechar no sólo para deshacerse de los inmuebles que tienen en sus balances sino para captar negocio y ganar más dinero.

Captar negocio

Pero el interés de los bancos por captar hipotecas no es de ahora, ya que en el 2014, Bankinter empezó a comercializar su Hipotika, con una novedosa campaña publicitaria en la que decían que llevaban tanto tiempo sin dar hipotecas que ya ni se acordaban de cómo se decía. La entidad fue la primera en bajar el precio de ese producto, pero sus competidores no se quedaron atrás y poco después comenzaron a lanzar sus propias ofertas, de forma que ahora mismo, todas ellas están preparadas para luchar a «cara de perro» por su parte del pastel.

Y, como ocurre siempre, toda esta competencia es buena para el consumidor, como explica un reciente informe del comparador Kelisto.es, que asegura que las constantes rebajas en el diferencial de las hipotecas durante el último año, unidas a la caída del euríbor, permitirían un ahorro medio de 461,57 euros en la cuota anual de su préstamo. Según este informe, un consumidor que quisiera solicitar una hipoteca media, de 99.866 euros a pagar en 20 años, tendría que hacer frente, a día de hoy, a un interés medio del 1,77 %, lo que se traduciría en una cuota mensual de 494,36 euros, es decir, 5.932,3 euros anuales. En cambio, en enero del año pasado el interés del préstamo más económico era del 2,58 %, lo que significa una cuota mensual de 532,82 y de 6.393,86 euros al año. Y eso significa que el ahorro que obtendría si aprovechara los actuales recortes en los diferenciales sería del 7,22 %, es decir, unos 461,57 euros de media por ejercicio.

En caso de que un consumidor pudiera optar a la hipoteca más barata del mercado, la diferencia sería algo menor: a día de hoy, con la hipoteca más económica (euríbor más el 1 %) tendría que pagar una cuota anual de 5.689,56 euros, mientras que en enero de 2014, con la más barata (euríbor más el 1,25 %), la factura sube a 5.943,96 euros al año. Por lo tanto, el ahorro sería de 254,40 euros respecto al año anterior (-4,28 %), según la portavoz de Finanzas Personales de Kelisto.es, Estefanía González.