Draghi vuelve a insinuar una compra de deuda y precipita la caída del euro

Berlín / dpa

ECONOMÍA

El presidente del BCE descarta una ruptura de la eurozona.
El presidente del BCE descarta una ruptura de la eurozona. reuters< / span>

Augura que los tipos seguirán en tasas muy bajas «por largo tiempo»

03 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El euro se desplomó ayer al nivel más bajo de los últimos cuatro años y medio después de que el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, reiterase que la entidad se prepara para adquirir bonos soberanos y proteger a la frágil economía de la eurozona del riesgo de deflación. La divisa única europea llegó a caer en el transcurso de la jornada a 1,2 dólares, el nivel más bajo desde junio del 2010. Este abaratamiento frente al dólar facilitará las exportaciones, por ejemplo, en España, que es uno de los principales motores de la economía del país.

El movimiento llegó tras conocerse una entrevista que publicó ayer el diario económico alemán Handelsblatt. En ella, Draghi estima que la zona euro corre peligro de entrar en una fase de deflación generada por la caída masiva de los precios del petróleo y la debilidad de la demanda en el espacio monetario. «El riesgo de que no cumplamos nuestro mandato de mantener la estabilidad de precios es mayor que seis meses atrás», dijo Draghi. Y ese riesgo de deflación) «no se puede excluir por completo, pero es limitado». «Estamos efectuando los preparativos [...] para el caso de que sea necesario reaccionar a un período demasiado largo de inflación baja», señaló Draghi. Y ahí indicó que la compra de bonos soberanos figura entre los instrumentos que el BCE podría utilizar.

Es previsible que los datos de diciembre, que desvelará Eurostat la semana próxima arrojen una inflación negativa. Esto allanaría el camino para que el BCE actúe en su primera sesión del año -el día 22- y anuncie la compra de deuda soberana, así como también de títulos de empresa. Draghi tiene enfrente una considerable resistencia a esta compra de deuda, especialmente por parte de Alemania, que argumenta que esto reduciría la presión para que algunos países acometan reformas.

Draghi también dejó claro que no tiene de momento intención de aumentar los tipos de interés, actualmente en el 0,05 %: «Las tasas han sido muy, muy bajas por largo tiempo y probablemente se mantengan así por el momento».

El italiano descartó asimismo el desmembramiento de la zona euro pese a los temores que genera la perspectiva de un triunfo de la izquierda radical en Grecia.