La entidad abrirá por la tarde de lunes a jueves en el 7,5 % de las oficinas
27 dic 2014 . Actualizado a las 18:18 h.Después de un largo proceso negociador, la dirección de Abanca llegó a ayer a un acuerdo con la mayoría de la representación sindical (CC.OO., UGT y CSICA) para establecer un nuevo modelo horario y retributivo. La entidad renuncia a los despidos forzosos sobre 348 personas y a las reducciones de jornada de otros 1.134 empleados, medidas todavía pendientes de aplicar en el expediente de regulación de empleo (ERE) que estaba en marcha. El banco también cede en su pretensión de establecer el horario extendido en 190 oficinas, 88 más de las que había hasta ahora, pero a cambio ha acordado con los sindicatos un modelo según el cual el 7,5 % del total de sucursales -tiene casi 700 en toda España- funcionarían en horario de 8 a 14.30 horas y de 16.30 a 19 horas de lunes a jueves. Oficinas todavía pendientes de definir, pero que son las que tienen una mayor demanda, con lo que Abanca se aseguraría la cobertura de atención que buscaba al inicio de las negociaciones en aras de la eficiencia.
El horario general para el resto de la plantilla será de 8 a 16.30 horas, con dos tardes a la semana hasta las siete, excepto en verano y Navidad. El acuerdo alcanzado por la dirección del banco con la representación sindical -del que se ha desmarcado la CIG y que ASCA someterá a votación- incluye algunos puntos que afectan a los salarios. La entidad controlada por Escotet quería equiparar las retribuciones en Galicia a las del resto del sector. Y ha logrado algunos cambios: los complementos por funciones para aquellos trabajadores con salarios mayores a 60.000 euros pasan a ser variables. El banco solo financiará el 50 % del seguro médico de cada empleado y durante el 2015 y el 2016 el llamado plus de convenio, equivalente a una cuarta parte de una paga, queda provisionalmente suprimido. La entidad también se ahorra la aportación del 2015 a los fondos de pensiones de la plantilla, y el 50 % de la del 2016. Los nuevos contratados pasarán a tener 18,5 pagas en lugar de las 21 que tienen los trabajadores con contrato en vigor. El convenio de Abanca expiraba el día 31 y la dirección de la entidad, amparándose en la reforma laboral, había planteado de inicio una inaplicación para «mejorar la eficiencia, la competitividad y la atención al cliente».
El banco decidió abrir este proceso a comienzos del mes de diciembre, justo después de que se cerrase la integración del Etcheverría -con salarios más bajos- y de que se celebrasen las elecciones sindicales.
Abanca ya había arrancado las negociaciones con la intención de anular todo lo relativo a las reducciones de jornada pendientes en el ERE, pero finalmente, en aras de lograr un modelo más flexible, ha transigido también con la renuncia a ejecutar los despidos forzosos del expediente, una demanda que los sindicatos habían colocado encima de la mesa desde el primer momento.
El acuerdo suscrito ayer garantiza un escenario de estabilidad para los 4.500 empleados que la entidad financiera tiene en Galicia.
Trabajadores afectados
La entidad cuenta con más de 600 oficinas repartidas entre Galicia y España.