Las firmas del AVE a La Meca se reúnen hoy para acelerar las obras, en medio de una gran tensión

redacción / la voz

ECONOMÍA

Las empresas españolas han sido amenazadas con retirárseles los contratos si no cumplen los plazos

26 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

El toque de atención que el nuevo ministro de Transportes de Arabia Saudí, Abdullah Al-Muqbel, ha dado a las adjudicatarias españolas de la contrucción del AVE La Meca-Medina ha hecho saltar las chispas en el seno del consorcio. Al-Muqbel las ha instado a acelerar los trabajos e incluso ha amenazado con retirar los contratos a las que no cumplan los plazos de ejecución.

Obra faraónica

El grupo de empresas responsables de la faraónica obra -valorada en 6.700 millones de euros- se reúnen hoy para elaborar un plan de emergencia con el que asegurarse de que el proyecto se entrega en plazo y forma. La reunión no será precisamente una balsa de aceite. la razón: el enfrentamiento que mantienen OHL y la gallega Copasa.

La gota que colmó el vaso y que desató la polémica fueron unas declaraciones del consejero delegado de OHL -firma controlada y presidida por Juan Miguel Villar Mir-, el ex ministro Josep Piqué, ofreciéndose a asumir más carga de trabajo para garantizar que se cumple el calendario acordado. Dando a entender, con ello, que sus socios no son capaces de cumplir con su parte del trato. Unas palabras estas que sentaron como un tiro en Copasa. Tanto que la gallega vino a asegurar en un comunicado que si alguien se estaba retrasando en sus tareas era OHL.

El consorcio que a finales de 2011 se adjudicó este proyecto, uno de los mayores logrados por España en el exterior, está integrado por doce empresas. Se trata de las públicas Adif, Renfe e Ineco, y las privadas Cobra (ACS), Consultrans, Copasa, Dimetronic, Imathia, Inabensa, Indra, OHL y Talgo, además de las saudíes Al Shoula y Al Rosan.

El megaproyecto del AVE La Meca-Medina comprende la construcción de la denominada superestructura (las vías y los sistemas de comunicación, electrificación y seguridad) de la línea, de 450 kilómetros de longitud. El plazo de ejecución de la obra está fijado para finales del 2016.

Explotación durante 12 años

El contrato también incluye la posterior explotación durante doce años por parte de Renfe -con los trenes suministrados por Talgo-, de este corredor AVE que unirá las dos ciudades santas en dos horas y media.