La banca pone contra las cuerdas a Martinsa, al borde de la quiebra

Madrid / Agencias

ECONOMÍA

Rechaza el plan de reestructuración de la deuda, pero la empresa presentará otro

18 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Los bancos acreedores de Martinsa-Fadesa han rechazado unánimemente el tercer plan de refinanciación presentado por la empresa para reestructurar la deuda de 3.500 millones que soporta, y han planteado la liquidación como la opción «más viable» para la inmobiliaria, que hace tres años superó el mayor concurso de la historia. La banca tildó de «inaceptable» la última propuesta de Martinsa en una reunión «de urgencia» celebrada el martes, al mantenerse una alta quita en la deuda y una entrega de activos sin valorar.

El nuevo rechazo llega en la recta final hacia el 31 de diciembre, cuando la empresa tendrá que hacer frente al pago de deuda fijado en el convenio de acreedores con el que superó el concurso, un importe equivalente al 23 % de su pasivo. En caso de que Martinsa no cumpla con este pago, se verá inmersa en causa de disolución, dado que sería el segundo impago consecutivo que no atiende, después de que aún tenga pendiente de abonar el de diciembre del 2013. Según algunas fuentes, varias entidades acreedoras están presionando para llegar a esa liquidación porque apenas tendrá impacto en sus carteras: está todo provisionado. En el pool de acreedores hay más de una docena de bancos españoles y extranjeros, junto a la Sareb (el llamado banco malo). Acumulan más de 5.000 millones en pasivo.

La compañía parece dispuesta a pelear para evitar la quiebra. Este viernes presentará a sus bancos acreedores un cuarto plan para refinanciar su deuda que, entre otros aspectos, ofrece canjear deuda por acciones de la inmobiliaria. La empresa se reunirá posteriormente, el próximo lunes, con la banca para analizar la propuesta. Fuentes de Martinsa garantizaron que van a hacer «todos los esfuerzos posibles» por alcanzar un acuerdo con la banca antes del día 31. El nuevo plan incluirá distintas opciones para reestructurar la deuda, entre ellas la de su capitalización.