La Eurocámara da pie al xeito para confiar en que sorteará la prohibición

Los xeiteiros gallegos regresaron ayer de Bruselas a Redondela, Cambados, A Pobra, A Illa, Moaña e Rianxo casi con el firme convencimiento de que podrán seguir empleando el arte con el que trabajaban sus padres, sus abuelos y sus ancestros desde el siglo XIV. La propuesta lanzada por la Comisión Europea de prohibir todas las redes de enmalle a la deriva en aguas europeas no gusta ni en la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo, ni en la de Medio Ambiente. Y aunque el ponente de una y otra harán propuestas diferentes, en ambas quedaría excluido de esa prohibición, aunque quizá no figure la palabra xeito de forma expresa.

La más convencida, Renata Briano, la italiana que se ocupa de marcar la posición de la Comisión de Pesca. Briano, como anteayer hizo Cadec -presidente de esa otra división de la Eurocámara-, insistió en que la propuesta es «una provocación» y más hacia la pesca artesanal.

La italiana tiene claro que el verdadero objetivo de la Comisión, el que dio pie al reglamento, es la ferretara, una red de 2,5 kilómetros con malla de 10 milímetros que se emplea en el Mediterráneo. Pero para Briano ni siquiera la ferretara debería suponer un problema, si se emplea legalmente. Y en ese sentido irá su propuesta: regular las redes y sus usos, más que vetar cualquier aparejo.

Briano discrepa, sin embargo, con Cadec porque no es partidaria de devolver la propuesta a la Comisión Europea, sino de enmendarla, corregirla y, después, pactarla. De la misma opinión es Marco Affronte, su compatriota que ha asumido el informe en la Comisión de Medio Ambiente.

El italiano también está por la labor de enmendar el reglamento de la Comisión y propone dar un plazo de dos años y medio a los Estados miembros para que recopilen información sobre el impacto de cada red de enmalle a la deriva que se emplee en sus lugares de origen y después decidir si se prohíben o no. Affronte trasladó a los profesionales que, si el xeito es sostenible, los xeiteiros no tienen nada que temer.

Sostenibilidad. Un concepto poco objetivo que el alcalde de Rianxo, Adolfo Muíños, prefería tener cuantificado para tener mayor seguridad. El eurodiputado intentó dársela explicando que, si prospera su propuesta, el xeito no tendrá ningún problema para seguir existiendo, dado que el veto iría dirigido a las redes de menos de 50 milímetros (el xeito es de 23,40). Y si el xeito es sostenible, los xeiteiros no tienen que temer.

No es que disculpase a la Comisión Europea, pero lo cierto es que Affronte se quedó sorprendido al conocer, en su día, que en Galicia había 427 embarcaciones que empleaban la red de xeito, pues, aseguró, los datos de los que disponía, obtenidos vía Ejecutivo, era de que eran apenas 25 las que vivían de la captura de xouba y sardina con ese arte.

Ni que decir tiene que esa constatación indignó a la delegación allí desplazada: «Tivemos que vir nós a Bruxelas a explicar o que é o xeito cando nós tiñamos que estar a traballar», explicó Rafael Varela, xeiteiro de Cambados. Jorge Ordóñez, de Rianxo, reprochó abiertamente «ao Goberno, porque a nosa estancia aquí sirveu para confirmar que non nos apoiou e non fixo nada en favor do xeito». Y lo dijo tras comprobar que miembros del Gobierno gallego estaban allí en Bruselas, a su lado, mientras mostraban a Affronte la viajada red del xeito que la delegación gallega paseó por Comisión y Parlamento europeo.

Como quiera que sea, lo cierto es que, ahora, tras dos días de encuentros y entrevistas, el xeito ha encontrado cierta tranquilidad. «Esta batalla ímola gañar», sentenció confiada Ana Miranda, portavoz del BNG en el Parlamento Europeo, que organizó el viaje de alcaldes, marineros y patrones mayores gallegos. Pero dejó claro que si se gana será porque «o sector pesqueiro traballou, non pola defensa que fixo o Goberno, que era o que tiña que estar aquí dando a batalla».

«Esta batalla ímola gañar, pero porque o sector pesqueiro traballou, non polo Goberno galego»

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