Bernanke, sin hipoteca por restricciones que él mismo impulsó

Victoria Toro NUEVA YORK / CORRESPONSAL

ECONOMÍA

Pese a sus grandes ingresos, el ex de la Fed quiere refinanciar su crédito y la banca se lo niega

08 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

«Hace poco intenté refinanciar mi hipoteca y no lo conseguí». La persona que pronunció esas palabras hace unos días en Chicago no era otro que Ben Bernanke, que fue, desde el 2006 hasta este mismo año, presidente de la poderosa Reserva Federal estadounidense (la Fed, su banco central). Su frase provocó las carcajadas del público asistente a la charla, pero Bernanke insistió en su frase: «No es una broma, me ha ocurrido».

Bernanke explicó entonces que cree que los bancos han ido demasiado lejos en las condiciones que imponen para conceder créditos hipotecarios. Pero pareció olvidar que fue él uno de los que impulsaron que esas condiciones se endurecieran para evitar una nueva burbuja inmobiliaria como la que desembocó en la crisis del 2008 que aún hoy colea. Bernanke es hoy autoempleado, y a este colectivo se le ponen ahora más trabas desde la banca.

Bernanke ganó unos 200.000 dólares anuales como presidente de la Fed, pero se embolsa mucho más desde que dejó el puesto. Por la primera charla que dio, de unos cuarenta minutos, pocas semanas después de abandonar la Reserva Federal, cobró 250.000 dólares. Además está escribiendo sus memorias y por ellas ha recibido un adelanto de un millón. La casa que Bernanke quería hipotecar vale 672.000 dólares, así que habría necesitado menos de tres conferencias para pagarla. ¿Por qué refinanciar, entonces?

Los analistas inmediatamente han comenzado a especular con las razones que han llevado a Bernanke a querer esa operación por su casa en Washington. Y han llegado a dos conclusiones. Por una parte, el antiguo jefe de la Fed debe estar convencido de que los tipos hipotecarios están a punto de subir. Y, por otra, que lo que intenta Bernanke es desgravar impuestos porque sus ingresos son suficientemente altos como para no necesitar crédito.

Un estudio reciente sobre refinanciación de hipotecas en Estados Unidos decía que un 20 % de los hogares hipotecados con créditos de interés fijo que podrían haber refinanciado su crédito no lo habían hecho.

Bernanke no es el único economista que ha estado recientemente en la gestión política estadounidense que ha tenido problemas con la hipoteca. A Alan Krueger, ex jefe del equipo de asesores económicos de la Casa Blanca se le denegó un crédito para comprar una segunda vivienda por 650.000 dólares.