Productores lácteos creen que Río quiere desprenderse de parte de su recogida en Galicia

Por si la caída de los precios o la amenaza de multa por sobreproducción no fuesen suficientes, otra nueva polémica amenaza con sacudir al siempre convulso sector lácteo gallego. En esta ocasión se trata de unas cartas que la empresa Leche Río está remitiendo durante los últimos días a algunos de sus ganaderos en las que se les advierte de que la materia prima que comercializan supera los valores medios de lactosa que registra el conjunto de la leche producida en Galicia y que, de no corregirse esta situación, les suspenderán la recogida a partir del 1 de octubre.

Lo que para Leche Río, tal y como exponen en su misiva, «puede suponer un indicio de leche adulterada que no cumple los parámetros de calidad que exigimos en esta empresa», para la Organización de Productores Lácteos (OPL) que aglutina a ganaderos de toda España, no es más que una argucia de la empresa para desprenderse de parte de sus proveedores y evitar así aumentar sus enormes excedentes de leche. «Esta é unha forma encuberta, unha escusa, para abandonar a gandeiros con contrato firmado e baixar aínda máis os prezos en orixe», apunta Manuel Iglesias, presidente de OPL, que reconoce haber trasladado el asunto a la Consellería do Medio Rural. «Non tiñan coñecemento do sucedido e comprometéronse a estudalo porque este tipo de prácticas poden supoñer un precedente perigoso».

Tal y como afirma este ganadero de Santa Comba «actualmente non existe ningunha normativa legal que regule a porcentaxe de lactosa no leite e, aínda que existirá, os laboratorios de Leche Río non son independentes nin poden aportar datos fiables para invalidar unha proba». El responsable de OPL manifiesta igualmente que los ganaderos son los primeros interesados en que llegue al mercado una leche de excelente calidad y piden para ello que las empresas se ciñan a la actual normativa y no inventen nuevos parámetros que enmascaren otros objetivos.

Desde Leche Río, su administrador Jesús Lence señala que las cartas se enviaron a una veintena de ganaderos que registran porcentajes de lactosa «sensiblemente máis elevados do habitual» y confirma que de no corregirlos se les suspenderá la recogida. «Dos 1.400 gandeiros que entregan a Leite Río eran 200 os que tiñan problemas coa lactosa e agora apenas quedan vinte. E estes teñen que rebaixala se queren que lles sigamos recollendo».

Preguntado por las causas de estos supuestos índices anómalos de lactosa remite a que sean los propios ganaderos los que den una respuesta. «Pregúntalle a eles. Eles deben de saber o que fan co seu produto. Non é cousa do leite, nin das vacas. E cousa dos propios gandeiros», señaló el empresario que apeló a la necesidad de que los productores sean lo más profesionales posibles en un mercado sin cuotas a partir del próximo mes de abril. En cuanto a los excedentes de leche, el empresario no solo los niega sino que incluso anuncia que durante noviembre y diciembre empezarán a importar leche de Francia «tal e como fixemos os outros anos».

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