Un juez inflexible y un especulador frente a un economista transgresor y una presidenta combativa

AFP

ECONOMÍA

La crisis de deuda de Argentina ha enfrentado al gobierno con uno de los mayores magnates americanos

30 jul 2014 . Actualizado a las 22:11 h.

Una presidenta combativa, un economista transgresor, un juez inflexible y un especulador multimillonario son los arquetipos que se encuentras tras las personalidades de Cristina Fernández de Kirchner, Axel Kicillof, Thomas Griesa y Paul Singer, protagonistas de la compleja pelea judicial entre Buenos Aires y los fondos especulativos que mantiene en vilo a toda la economía del país.

Pero, ¿quién es quién en esta compleja trama?

Kirchner, la presidenta combativa

Cristina Kirchner, la abogada de 61 años que desde el año 2007 ocupa la presidencia de Argentina, se caracteriza por su recurrente verbo apasionado.

En junio, calificó de «extorsión» el fallo que validó la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos a favor de los fondos especulativos, a los que también llamó «extorsionadores» y «buitre»

Pero las descalificaciones de Kirchner no se han quedado solo aquí, ya que para el juez del caso, Thomas Griesa, también ha tenido algunas palabras subidas de tono. A él lo descalificó en la Cumbre de Mercosur de Caracas celebrada este martes asegurando que «no es juez» porque no respeta «la igualdad ante la ley» y no resuelve de manera «igualitaria».

Militante centroizquierdista del peronismo, viuda de Néstor Kirchner, quien la antecedió en la presidencia, esta mujer sentó las bases de su carrera política en la provincia patagónica de Río Gallegos, donde nacieron su hijos, Máximo (1977) -quien la hizo abuela hace un año- y Florencia (1990).

Con amplia experiencia legislativa, ha hecho gala de su estilo más confrontantivo en esta disputa con cruces de opiniones políticas sobre las decisiones legales que se toman en Nueva York y que repercuten en la economía argentina.

Kicillof, el ministro transgresor

Axel Kicillof, el ministro de Economía nombrado por Kirchner el pasado noviembre, es un economista keynesiano que se opone al modelo ultra-liberal y actualmente goza del privilegio de ser uno de los hombres de mayor confianza de la presidenta.

A sus 42 años, Kicillof exhibe un estilo personal en el que combina lo informal con lo académico.

Conocido como el artífice de la nacionalización de la petrolera YPF, expropiada a la española Repsol en el 2012, Kicillof ha impuesto sus ideas de redistribución del ingreso y ha abogado por un fuerte rol del Estado.

Como ministro, ha destacado por acercar su país a las instituciones financieras internacionales como el Fondo Monetario Nacional (FMI) y el Club de París, después de que Argentina quedara fuera de los mercados de capitales a raíz de la suspensión de pagos del 2001.

Kicillof fue dirigente de la organización marxista universitaria heterodoxa «Tontos Pero No Tanto (TNT)», ideología de la que no ha renegado hasta el momento.

Griesa, un veterano firme

Thomas Griesa, de 83 años, ha sido durante la última década el juez federal de la Corte de Nueva York encargado de atender las demandas y contrademadas del caso entre Argentina y sus acreedores con deuda en mora.

Designado por Richard Nixon en 1972, una vez que termine la disputa judicial con Argentina podrá jubilarse y partir al rancho de Montana donde suele pasar sus vacaciones.

Su fallo a favor de los fondos especulativos le valió recientes críticas de juristas que expresaron al diario The New York Times sus amplias dudas sobre la «capacidad de comprensión» de Griesa de la magnitud de su decisión, e indicaron que esta «no inspiraba confianza en el sistema judicial» de Estados Unidos.

Paul Singer, el especulador

Cuando los políticos reclaman la necesidad de «regular» y «transformar» el sistema financiero internacional se refieren precisamente a personajes como Paul Singer, el multimillonario estadounidense de 69 años especializado en comprar deuda de países como Perú, el Congo o Argentina cuando su valor se encuentra por los suelos para luego reclamar su precio nominal más algunos intereses.

Presidente de Elliott Management Corporation, uno de los fondos que ganó el juicio contra Argentina en los tribunales de Estados Unidos, es psicólogo con una especialización en leyes en la Universidad Harvard y militante activo del Partido Republicano.

Su osadía en los negocios lo ha llevado a amasar una fortuna calculada en 1.500 millones de dólares, según la revista Forbes.

Como filántropo ha sido especialmente generoso en la causa a favor del matrimonio gay, en abierta oposición a sus correligionarios republicanos. No es de extrañar su apoyo a esta causa, ya que en el año 2010 uno de sus hijos se casó con otro hombre.