Pórtico, más cerca de salvarse tras alcanzar un principio de acuerdo con el Fogasa

Soledad Antón García
Soledad Antón VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Un fondo de inversión americano espera la firma del pacto para inyectar liquidez en la compañía de decoración

18 jul 2014 . Actualizado a las 13:06 h.

La salvación de Pórtico parece cosa hecha tras el principio de acuerdo al que ha llegado con el Fondo de Garantía Salaria (Fogasa) para que adelante el grueso de la indemnización -3,3 millones de euros- a los 200 trabajadores despedidos en noviembre, según transmitió ayer la dirección a los empleados. El ERE fue uno de los dos pilares sobre los que se sustentó el plan de viabilidad de la compañía para salir del concurso de acreedores. El otro fue el perdón de la mitad de la deuda ordinaria -32,5 millones- por parte de los acreedores, bancos en su mayoría.

Imposible hacer frente con la caja vacía a las indemnizaciones de los despedidos. Pórtico planteó entonces al Fogasa que adelantase el dinero, propuesta que aceptó de forma verbal. El problema surgió al no existir documento escrito del pacto.

Fue el inicio de un camino tortuoso para Pórtico apenas unos días después de haber superado el concurso. La plantilla convocó tres jornadas de huelga para denunciar el sinsentido que suponía que el Fondo de Garantía se negara a cumplir la palabra dada y adelantar 3,3 millones. De confirmarse dicha negativa la empresa se vería obligada a ir a liquidación, lo que implicaba que los 181 trabajadores que siguen en plantilla también se quedarían sin empleo y el Fogasa tendría que pagar luego seis millones.

Madrid exigió un aval equivalente a la totalidad de la deuda a Pórtico, en el que tuvo que incluir la marca, dado que las propiedades que posee sin hipotecar se tasaron en 2,2 millones.

Por otra parte, la empresa cerrará hoy un último fleco pendiente, el aplazamiento de la deuda que mantiene con la Seguridad Social. Esta aceptó desde el primer momento el pago a plazos, cosa que también terminó haciendo la Agencia Tributaria hace unos días.

La empresa confía en cerrar el acuerdo con el Fogasa la próxima semana. Podrá así dar entrada a un fondo de inversión americano interesado en inyectar liquidez para que pueda volver a operar con normalidad. Una de las primeras cosas que permitirá dicha inyección será retirar los 30 contenedores cargados de mercancía que tiene en el puerto de Vigo y que saca a cuentagotas en la medida que hay dinero en caja. «Tenemos clientes comprensivos», afirman.