Cuatro arcos localizados en los centros logísticos, una especie de pistola lectora y un iphone, que permitirá el traspaso de información entre empleados, son los aparatos más visuales de la tecnología RFID, para la identificación de las prendas por radiofrecuencia tanto en los almacenes como en las tiendas. Inditex la viene testando desde el 2009 y ayer fue presentada a los accionistas por el presidente de la multinacional, Pablo Isla, quien subrayó que esta técnica le proporcionará una mayor agilidad en la distribución de las unidades y más precisión en la gestión de los centros de venta. «La implantación de esta tecnología de última generación es el cambio más importante en la operativa de las tiendas del grupo hasta el momento», dijo.
El primer paso del sistema, desarrollado por la firma Tyco, tiene lugar en los centros logísticos. Cada producto pasa cuatro veces por una especie de arcos que transmiten los códigos y se «quedan sellados» en las etiquetas. Luego las unidades son enviadas a los establecimientos, donde se identifican de forma inmediata con esa especie de pistolas. Se sabe entonces qué tallas y modelos están disponibles y cuáles hay que reponer. Las dependientas, por su parte, a través de unos iPhones podrán conocer si el producto que les solicitan los clientes está en la tienda, las tallas que tienen, y si hay disponibilidad en otros establecimientos o a través de Internet.
Las citadas pistolas son capaces de leer incluso los códigos de los productos que se transportan en cajas cerradas
La multinacional gallega del textil calcula en un 60 % el ahorro de tiempo en la gestión de las tiendas que le proporciona el sistema. En la actualidad, los centros logísticos y 700 tiendas Zara ya están provistas con RFID, que, según las previsiones, se aplicará en la totalidad de los establecimientos Zara en el 2016, y progresivamente en el resto del grupo.