España pidió hace justo dos años el rescate bancario que empieza a devolver

EFE

ECONOMÍA

El préstamo era de hasta 100.000 millones de los que finalmente se utilizaron unos 40.000

09 jun 2014 . Actualizado a las 20:28 h.

Hoy se cumplen exactamente dos años desde que el ministro de Economía, Luis de Guindos, anunció que España solicitaba a sus socios europeos una ayuda de hasta 100.000 millones euros para sanear su sistema financiero y que ahora comenzará a devolver de forma anticipada.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, anunció el pasado viernes que España devolverá 1.300 millones del rescate financiero, un préstamo de hasta 100.000 millones del que finalmente se han utilizado unos 40.000.

Hace justo dos años, el sábado 9 de junio del 2012, el Ejecutivo anunciaba que solicitaba auxilio a Europa para sanear la banca, y ello después de que la crisis de Bankia, nacionalizada un mes antes, disparase el temor del mercado sobre la situación del sector.

Ello provocó que la prima de riesgo marcara máximos por encima de 600 puntos básicos, con el bono español a diez años en niveles insostenibles, más allá del 7 %. Hoy, sin embargo, la deuda española está por debajo del 2,6 % y el riesgo país, próximo a 120.

La petición formal de la «asistencia financiera» por parte de España se produjo el 25 de junio y el Eurogrupo la aprobó el 20 de julio, tras firmar el Memorando de Entendimiento (MOU), el documento que recogía las condiciones de la ayuda.

El Gobierno destacaba que no tenía exigencias macroeconómicas, pero el pacto obligaba a que el sector efectuara una profunda reestructuración, se reforzara el papel del FROB y del fondo de garantía de depósitos o, que la banca tuviera una ratio de capital de al menos el 9 % hasta el 2014.

También requería la creación de un banco malo, Sareb, o la aplicación de quitas para los tenedores de preferentes y deuda subordinada, así como un seguimiento exhaustivo por parte de los «hombres de negro»: la Comisión Europea, el BCE y el FMI.

Con la ayuda concedida por Europa, Bankia, Novagalicia, Catalunya Caixa y Banco de Valencia recibieron 36.968 millones, en tanto que también se sanearon las cuentas de Liberbank, Caja3, España-Duero (Ceiss) y BMN, que finalmente acabó siendo nacionalizada.

Pero el 2 enero del 2014, y tras 18 meses de reformas y ajustes, España salió del programa de rescate y a la reestructuración le quedan por cerrar solo algunos flecos, como la venta de Catalunya Banc, o la salida del capital de BMN y Bankia, de la que el Estado se ha deshecho ya de un 7,5 %.

Además, dos años después del rescate, la economía ha salido de la recesión y la recuperación avanza, las agencias de calificación han mejorado la solvencia del país y, los expertos coinciden en que la confianza de los inversores ha vuelto a España.

Para ello ha sido clave el esfuerzo de la banca por mejorar su solvencia, la reclasificación de créditos como fórmula de aflorar morosidad o la limitación de los dividendos que aprobó el Banco de España, cuyo gobernador, Luis María Linde, también cumple dos años al frente del organismo, en el que podría estar hasta 2018.

Aún así, la banca española afronta aún importantes retos como mejorar sus ingresos y rentabilidad y empezar a operar bajo el paraguas de la unión bancaria.