Pemex construirá en México 16 buques a los que optaban astilleros gallegos

Soledad Antón / M. Sío Dopeso VIGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Carrera Panizo, en el «stand» que PMI (Pemex) tiene en Navalia.
Carrera Panizo, en el «stand» que PMI (Pemex) tiene en Navalia. M. M.< / span>

Armón asume el desarrollo técnico de 7 unidades y opta a hacerse con las otras 9

22 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El sueño de construir una flota de embarcaciones menores para Pemex se ha esfumado definitivamente para los pequeños astilleros gallegos. Los 16 buques se harán en México, con el apoyo industrial y tecnológico de Armón. La firma asturiana, con sedes en Vigo, Navia y Gijón, ya ha firmado el contrato de las siete primeras unidades y tiene prácticamente cerrada la adjudicación de las nueves restantes, según confirmaron ayer fuentes del naval mexicano que participan en Navalia, la feria internacional del naval que hoy se clausura en Vigo, y que reúne a 300 expositores.

Según estas fuentes, Armón asume el desarrollo técnico, la compra de componentes y la construcción de bloques y piezas que, posteriormente, se enviarán a México para el ensamblaje de los buques.

Armón es el astillero que ahora mismo cuenta con la cartera de pedidos más elevada de España (una decena de buques, además de los contratos de Pemex) y no figuraba en los inicios del proyecto de renovación de la flota menor de la petrolera mexicana.

Sí estaban los gallegos Freire y Valiña, que llegaron a constituir un consorcio con los mexicanos Seni (Mazatlán) y TNG (Veracruz) para optar a la construcción de tres tipos de barcos. Esta alianza gallego-mexicana se rigió por los principios que Pemex y la Xunta establecieron en sus respectivos convenios de colaboración estratégica, en octubre del 2012.

Aspiraciones frustradas

En aquel momento, se habló de la construcción de 14 embarcaciones, en concreto remolcadores, de los que se dijo que la mitad se construirían en Galicia y la otra mitad en México con tecnología también gallega. Pero estas aspiraciones se vinieron abajo hace ya meses, sobre todo después de que la petrolera adquiriera Hijos de J. Barreras, en noviembre del 2013.

Armón se garantiza así una carga de trabajo que no ha trascendido si se realizará íntegramente en su astillero vigués o, por el contrario, repartirá con los de Asturias. Lo único cierto es que los buques tienen un plazo de entrega de 18 meses.

La factoría viguesa trabaja en estos momentos en dos atuneros de 80 metros de eslora para armadores mexicanos y un remolcador para un cliente nacional. Fuentes de la compañía confirman que solo con estos pedidos tienen carga de trabajo hasta el verano del 2015.

La reactivación del sector, especialmente en el aspecto financiero -los astilleros confirman que está volviendo a fluir el crédito- hace que Freire y Valiña encajen un poco mejor el golpe. Freire cuenta los días para iniciar la construcción de un buque escuela para Indonesia, que prevé arrancar el próximo mes de junio, prácticamente un año después de adjudicarse el concurso frente a un astillero polaco. Con 110 metros de eslora, el buque tiene un presupuesto de 75 millones. Freire también se adjudicó recientemente un oceanográfico para un organismo científico de Kuwait, si bien se trata de un proyecto aún muy verde.

De la factoría coruñesa Valiña, lo único que ha trascendido es que tiene un par de proyectos muy avanzados, «pero no ofreceremos datos hasta que no estén firmados», dice el responsable de la firma y presidente de Aclunaga, Fernando Alcalde. Lo que sí reconoce es el cambio de ciclo del sector.

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Pemex

Carga de trabajo contratada por la petrolera Pemex en Galicia.