Los expertos piden una reforma fiscal equitativa y antifraude

Ana Balseiro
Ana Balseiro MADRID / LA VOZ

ECONOMÍA

El Gobierno retrasa una semana la presentación del «documento Lagares»

06 mar 2014 . Actualizado a las 09:43 h.

El informe de la comisión de sabios que preside Manuel Lagares y que servirá de base a la reforma tributaria del Gobierno está listo. El ministro de Hacienda recibirá las conclusiones el jueves 13 y las elevará al Consejo de Ministros del 14, con una semana de retraso sobre lo anunciado inicialmente por Montoro.

Pero a la espera de las recomendaciones de la comisión Lagares, expertos y agentes sociales insisten -al hilo de los últimos anuncios de Rajoy- en pedir una reforma fiscal de alcance, que solucione la crónica falta de capacidad recaudatoria, recupere la equidad, simplifique el sistema y reduzca la sangría del fraude. «El margen de maniobra del Gobierno va a depender de si la economía despega con fuerza. Pero sería bueno que se revirtieran las medidas introducidas que están haciendo daño a contribuyentes y empresas. La crisis nos ha llevado a un estado de excepción tributario y hay que ponerle fin», resume Ricardo Gómez-Acebo, socio de Deloitte Abogados. Algunas propuestas de los expertos para los grandes impuestos se detallan a continuación:

IRPF

Deshojando la margarita de la rebaja impositiva. El vehículo recaudatorio por excelencia, el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF), divide a los especialistas, aunque hay consenso en reducir los tipos, al menos para las rentas más bajas. El centenar de expertos que integran el Consenso Fiscal que elabora semestralmente PwC y que acaba de publicarse bajo el título de Un punto de partida para la reforma fiscal, recoge la opinión de que hay que reducir la presión fiscal. «Lo primero que hay que hacer es crear un sistema que tenga una capacidad recaudatoria significativa y que esté bien gestionado», señala Ignacio Zubiri, catedrático de Hacienda de la Universidad del País Vasco, que resume los objetivos de la reforma en «depurar bonificaciones, cerrar vías de elusión y reducir el fraude», añadiendo que «inicialmente no deben aumentarse los tipos de los impuestos más importantes».

¿Mantener o no el sistema dual? En la misma línea de Zubiri está la batería de propuestas enviada por el sindicato de técnicos de Hacienda (Gestha) al ministerio, abogando, entre otras cosas, por «reducir los efectos contrarios a la progresividad derivados de la dualidad fiscal de las rentas del trabajo y del capital, excluyendo las ganancias especulativas del concepto de renta del ahorro», e incluyendo las rentas generadas en sicavs (vehículos de inversión de las grandes fortunas), fondos de inversión o sociedades instrumentales. Desde la CEOE, sin embargo, plantean mantener el sistema dual del IRPF con un tipo de gravamen único sobre el ahorro, mientras que piden eliminar el recargo adicional temporal que se aprobó para los años 2012 y 2013 y que se ha prorrogado este 2014. A favor de esta supresión también se posiciona Ricardo Gómez-Acebo, de Deloitte, por considerar que «aunque el IRPF ha sido de los impuestos que mejor han aguantado la crisis, en parte por la introducción del gravamen especial que elevó los tipos entre los más altos de Europa, a medio y largo plazo el efecto es perjudicial y no se mantiene la recaudación». También el recientemente fallecido David Taguas, en su última entrevista a La Voz, defendía un IRPF de tipo único (flat tax) con un mínimo exento «lo suficientemente elevado».

IVA

¿Subirlo o mantenerlo? Montoro aseguró que no se tocaría de nuevo. Sus palabras apagaron el incendio que provocó la filtración de que el comité Lagares propondría subir el IVA, algo sobre lo que este lunes volvió a insistir la presidenta del FMI, Christine Lagarde, en el Global Forum Spain de Bilbao. Desde el Registro de Asesores Fiscales (REAF) del Consejo General de Economistas defienden que se estudie la eliminación de algunas exenciones y de operaciones a tipo reducido, revisando los regímenes especiales. La patronal, por su parte, se opone a cualquier subida del impuesto y también «a desplazar bienes y servicios desde tipos reducidos al general», por entender que repercutiría en la ya debilitada demanda interna y comprometería la recuperación. Los sindicatos lo comparten. Zubiri defiende «depurar» los tipos reducidos porque tienen un coste elevado (más del 40 % de la recaudación) y sus ganancias de equidad son dudosas, ya que, en realidad, los ricos se ahorran más que los pobres. «Habría que tender, como en Dinamarca, a un sistema de tipo único con algunos bienes esenciales a tipo cero». Eliminar las declaraciones simplificadas y establecer mecanismos efectivos de lucha contra el fraude son propuestas de consenso.

Sociedades

Corregir la brecha entre el tipo nominal y el efectivo. Hay diversas opiniones. Gestha, por ejemplo, plantea establecer «uno o varios tipos impositivos superiores» para las bases imponibles positivas superiores al millón de euros. Así se nivelaría el tipo medio efectivo con las pymes y microempresas, a la vez que se eliminan los beneficios fiscales y la mayoría de las deducciones. Desde Deloitte Abogados, el socio en Galicia Fernando Vázquez defiende una «simplificación». «Se trataría de eliminar las deducciones que quedan» y reducir el tipo impositivo nominal para acercarlo al efectivo.

Otros impuestos

Nuevas fórmulas y lucha contra el fraude. Zubiri subraya que la forma de luchar contra el fraude es «haciendo que no sea rentable». Los expertos también plantean nuevas figuras impositivas, como clarificar la fiscalidad medioambiental o crear impuestos sobre la contaminación o las transacciones financieras.