El ministro Soria confía en que Navantia Ferrol reciba la adjudicación de un buque gasero
02 feb 2014 . Actualizado a las 13:40 h.El mar queda lejos de Madrid y, desde los tiempos de la reconversión, la industria de construcción naval gallega siempre se ha sentido una incomprendida en los despachos de la capital. Después de una década prodigiosa, en la que la cartera de pedidos de astilleros públicos y privados llegó a sumar 4.000 millones, en el 2008 comenzó una nueva y dramática caída en picado para un negocio del que dependen directamente 25.000 familias gallegas.
En la semana en la que Pemex adjudicó los primeros buques firmados en Navantia e Hijos de J. Barreras desde hace cinco años; y a medio camino entre el consejo de ministros celebrado este viernes en Madrid y la convención nacional del PP de Valladolid, José Manuel Soria (Las Palmas de Gran Canaria, 1958) pone en valor el trabajo del Gobierno en defensa del naval gallego.
-¿Qué papel ha jugado el Ejecutivo en las negociaciones con México para que, finalmente, Pemex reactive la construcción naval gallega con los dos floteles?
-Este Gobierno ha hablado en diversas ocasiones con el Gobierno de México para mostrar el interés de España en las negociaciones. Apoyamos a los astilleros para que pudieran optar a la construcción de los dos barcos de Pemex que finalmente han sido adjudicados. Nuestro papel ha sido, en todo caso, el de subrayar siempre la capacidad, la tecnología y la experiencia de nuestra industria naval.
-¿Cómo valora la compra del mayor astillero privado de España, Hijos de J. Barreras, por la petrolera mexicana?
-Como una buena noticia. Por una parte, pone de manifiesto la capacidad tecnológica y de innovación que distingue al sector naval español; pero además Pemex abre la oportunidad, como ya se ha podido ver, de traer importante carga de trabajo durante los próximos años.
-¿Qué quiere hacer el Gobierno con Navantia?
-El objetivo del Gobierno es buscar carga de trabajo en Navantia a corto plazo, es en lo que estamos volcados todas las instituciones en estos momentos. Por el momento, acabamos de tener muy buenas noticias para Navantia con la adjudicación del flotel de Pemex y con el contrato con Turquía, pero tenemos que seguir haciendo todos los esfuerzos para lograr más contratos.
-¿Hay un plan estratégico?
-Navantia está trabajando en su transformación para ser más competitiva, para tener un mejor futuro, y el objetivo es lograr esas mejoras manteniendo el nivel de empleo en todos sus centros de trabajo.
-La falta de carga de trabajo en Navantia, ¿hasta qué punto es consecuencia de la mala gestión?
-Esa falta de carga de trabajo ha sido producto de la situación de los mercados y de la incertidumbre que hubo sobre el sistema del tax lease español. Recordemos que la suspensión del anterior sistema de incentivos fiscales mantuvo paralizado al sector durante más de tres años. El Gobierno, las comunidades autónomas, los astilleros y los sindicatos trabajamos duro para lograr el visto bueno de este nuevo sistema que está ya en vigor. Lo importante es que ese trabajo ya ha empezado a plasmarse en decisiones concretas de encargo de barcos.
-Tras el flotel, ¿qué perspectivas hay de más carga de trabajo para Ferrol, una vez perdidos los gaseros? Si es que se pueden dar por perdidos...
-Confiamos en que algún gasero pueda ser encargado. (Evita dar más detalles al respecto)
-¿Está en los planes del Gobierno la adjudicación de una fragata o un nuevo megabuque?
-Ese es un tema que no me compete, corresponde al Ministerio de Defensa.
-El Gobierno sostiene que ha preguntado en la UE sobre la posibilidad de construir un dique flotante en Ferrol. ¿Cómo están las gestiones?
-Estamos a la espera de respuesta (el ministro hecha mano de documentación). En el 2013, concretamente el 10 de julio, España hizo una consulta interpretativa a la Comisión Europea sobre la posibilidad de la construcción de un dique flotante en Navantia Ferrol y su posible encaje en la decisión del 2005 sobre las actividades autorizadas para el astillero público. Posteriormente, solicitó información complementaria para proceder a una evaluación exhaustiva del asunto. El Ministerio de Hacienda está en contacto con los servicios de la Comisión para suministrar toda la información pedida y aclarar todas las dudas para que se tome una decisión al respecto lo antes posible. Por tanto, lo que puedo decir es que la consulta de las autoridades españolas continúa su procedimiento comunitario sin que exista una fecha concreta de decisión por parte de la Comisión.