Los créditos para pymes con esta fórmula superaron los 820 millones en la comunidad durante el año pasado
31 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Las empresas gallegas se repartieron durante el 2013 algo más de 820 millones de euros procedentes del Instituto de Crédito Oficial (ICO), una alternativa ante la prolongada sequía en el crédito.
Este producto se dispensa a través de los bancos y tiene dos protagonistas principales en Galicia: el Pastor-Popular y el Banco Sabadell. Los dos, muy centrados en el préstamo a pequeñas y medianas empresas en la comunidad. Es, sin embargo, el grupo que preside Ángel Ron el más activo, según datos provisionales que ya conocen las entidades bancarias. El Pastor cerró el año con una concesión de algo más de 296 millones de euros en las líneas de préstamo del ICO. Supone el 35 % de la cuota de mercado en Galicia, y en algunas provincias, como Pontevedra, según sus datos, roza el 40. Se vale para ello de su potente red en el noroeste, con 283 sucursales. Según datos del banco hasta septiembre -hoy presenta sus resultados anuales-, el Pastor-Popular cuenta con la comunidad con 98.000 pymes como clientes, con un crecimiento cercano al 3,5 %. Según sus números, controla el 22 % de todo el negocio bancario gallego. Es la segunda marca financiera por cuota total, solo por detrás de Novagalicia. Esta, pese a todo el ruido que ha generado en los últimos años, aún mantiene una elevada fidelidad en su territorio, por encima del 35 % en créditos y depósitos. Sin embargo, no está ni entre las cinco entidades con mayor concesión de fondos del ICO.
En este producto, la segunda entidad es el Sabadell, con 146 millones colocados, un 17 % del total del dinero ICO para empresas gallegas. Junto al Pastor acumula más del 50 % del negocio de estos préstamos. El resto se lo reparten otras ocho entidades. Se repite así en Galicia un modelo similar al otras partes del Estado, donde tres grandes bancos acaparan alrededor del 60 % del dinero del ICO.
Este tipo de créditos están pensados para pequeñas y medianas empresas con necesidad puntual de liquidez, con intereses algo por debajo de la media del mercado. Sin embargo, no están exentos de requisitos como avales. Para los bancos, tiene la ventaja de que, en caso de impago, no va contra su balance, sino contra el del Instituto Oficial.