La España posrescate bancario estará vigilada por Europa hasta el 2027

Adolfo Lorente

ECONOMÍA

La Comisión y el BCE visitarán dos veces el país hasta reintegrar el 75% de los 41.300 millones recibidos, y el MEDE hará lo propio hasta que se pague la totalidad Bruselas

09 dic 2013 . Actualizado a las 23:47 h.

El rescate bancario de España, quizá la peor pesadilla a la que se ha enfrentado el Gobierno de Mariano Rajoy, está a escasas semanas de llegar a su fin. Concluye como «un éxito» a ojos de Europa y de numerosas instituciones internacionales, pero no menos cierto es que se loa un defecto, un problema, un cáncer que se ha logrado atajar a tiempo pero que ha estado a punto de acabar con un país.

España saldrá «limpia» del rescate bancario, como ya se anunció hace un mes, pero más allá del gran título, las claves vuelven a estar en la letra pequeña. Porque el país, lejos de alharacas y palmadas en la espalda, seguirá bajo la estrecha vigilancia del Eurogrupo, el consejo de ministros de Economía de la moneda común que este lunes, en Bruselas, comenzó a definir las grandes líneas de qué pasará el 'día después', cuando España se adentre en la era posrescate

Así lo confirmaron fuentes conocedoras del debate, que aseguraron que el asunto se concretará durante las próximas semanas. La pretensión del Eurogrupo es que se cumpla con la legislación vigente ('Two Pack') y que la estrecha vigilancia continúe hasta que el Estado devuelva el 75% de los 41.300 millones recibidos del Mecanismo Europeo de Estabilidad, del MEDE, para salvar a cajas de ahorro como Bankia. A diferencia de lo ocurrido en el último año y medio, los hombres de negro del Fondo Monetario Internacional (FMI) ya no formarán parte de la troika dejando el peso del control a los expertos de la Comisión, que estarán apoyados por el Banco Central Europeo (BCE). Lo harán dos veces al año en lugar de cuatro.

Menos control pero control al fin y al cabo. Así lo aseguró este lunes por la noche el vicepresidente económico del Ejecutivo comunitario, Olli Rehn, que no se refirió específicamente a España pero sí a Irlanda, que también acaba de salir «limpia» del rescate bancario y que marca el camino a seguir -ha recibido 85.000 millones, la mitad de su PIB, para salvar al país de la quiebra-. Pero hubo sorpresa. El director del MEDE, el alemán Klaus Regling, sí citó a España y aseguró que «la idea es garantizar que los países paguen. Tendremos que estar allí hasta que se devuelva todo. La vigilancia de la Comisión termina cuando se paga el 75% del préstamo. Nosotros tenemos un mandato más estrecho pero estaremos en Irlanda, en España y en el resto de países»

El MEDE trabajará con un sistema de «alerta temprana» según el cual «hará análisis cada vez que venza un pago, que en algunos casos es trimestralmente, de si el dinero está disponible y previsto en el presupuesto» «Tenemos que proteger los recursos del fondo de rescate», justificó su máximo responsables. Según el calendario de pagos estipulado y si no se realizan amortizaciones tempranas, el Estado dejará estar atado de pies y manos en 2027

El ministro español Luis de Guindos eludió en las últimas horas comentar la cita ante los medios. Lo hará, no obstante, este martes y en clave, como suele ser habitual, de satisfacción contenida. Y es que superada la batalla del rescate, el Gabinete Rajoy se enfrenta a ahora a la batalla del relato, vender el «éxito» del programa de asistencia financiera a seis meses de las elecciones europeas. No será fácil.