Cero contratos para el naval gallego

Manoli Sío Dopeso
m. sío dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Los astilleros españoles firmaron 17 pedidos entre enero y octubre, pero ninguno se construirá en Galicia, en donde la cartera de nuevos buques suma 9 meses en blanco

22 nov 2013 . Actualizado a las 13:34 h.

La situación de la industria naval en el conjunto de España es mala, pero en Galicia es todavía peor. El sector, activo ya en muy pocas comunidades, solo logró firmar 17 nuevos pedidos de buques entre enero y octubre de este año.

Se trata de una cantidad muy baja, si se compara con las 35 unidades sumadas en el 2012, en plena crisis del tax lease. Pero lo más dramático de este pobre escenario para la construcción naval española es que ninguno de los 17 buques que se han contratado este año será construido en un astillero gallego, ni público, ni privado.

Según la Gerencia del Sector Naval, un organismo dependiente del Ministerio de Industria, la cartera de pedidos firmados en la comunidad gallega está integrada por 10 barcos, la cifra más baja desde que existe este registro. En la primera estadística, de enero del año 2000, la carga de trabajo contratada sumaba 15 unidades. Hasta el año 2006, en que comenzó el bum del naval, el volumen de contratación osciló entre los 12 y los 15 pedidos, aunque con algún astillero más en el listado, como el vigués M.Cíes, que fue liquidado en el año 2011.

El enemigo se llama UE

Fuentes veteranas en el sector gallego afirman que habría que remontarse a los duros años de la reconversión naval para encontrar un panorama tan desolador en las gradas de los astilleros gallegos. «En aquel momento, el enemigo era la UE, y de ahí el decreto de reconversión dictado por el Gobierno de Felipe González en 1982, que debía cumplirse antes de la entrada de España en la entonces Comunidad Económica Europea; y ahora el enemigo sigue siendo la Unión Europea, con la denuncia y la sentencia del tax lease», recuerda un empresario del naval.

La debilidad del negocio en la comunidad queda reflejada en la estadística de la Gerencia del Sector Naval, en comparación con autonomías como el País Vasco, cuya cartera de pedidos acapara el 40 % del total, con Zamacona al frente. Llama la atención el peso que ha ganado en el último año el naval asturiano, que en el 2012 representaba el 28 % de la actividad en España y, en los primeros nueve meses del 2013 acapara ya el 36 %, gracias, en buena medida, a la rebosante cartera de pedidos de Armón, integrada por 26 unidades, 7 de ellas firmadas este año.

Galicia pierde peso

Todo lo contrario que Galicia, que en el año 2010 representaba el 50 % del total y ahora solo el 24 %. ¿Por qué se encuentra en peor situación que los del resto de las comunidades? En el caso del sector privado, la clave está en que los dos mayores astilleros, Factorías Vulcano, primero, e Hijos de J. Barreras, después, cayeron en sendos concursos de acreedores que han dificultado las condiciones de acceso a la financiación para la contratación de buques, en un contexto ya enrevesado por la ausencia de un sistema de incentivos fiscales para captar el interés de los armadores.

La aprobación de un nuevo tax lease, hace ahora un año (en noviembre del 2012) no ha cambiado nada la situación. Los registros de la Gerencia del Naval confirman que la herramienta fiscal todavía no se ha estrenado en Galicia, aunque fuentes de Tributos aseguran que «hay varios expedientes de contratación que se están estudiando ya con el nuevo esquema».

Pero el nuevo tax lease no funciona, porque los bancos no confían en él. Aunque el plazo fijado para recuperar las bonificaciones fiscales del período 2007-2011 declaradas ilegales ya ha expirado, Bruselas y Madrid siguen a vueltas con la metodología para calcular la cantidad a recuperar. Al Gobierno le salen 126 millones, pero a Bruselas no le cuadra la cuenta y la burocracia sigue su curso.

En el 2010, Galicia representaba el 50 % del naval en España; hoy ha caído al 24 %

Habría que volver a los años de la reconversión para ver un panorama tan desolador