La empresa recurrió en el mes de julio al preconcurso, pero no ha logrado un acuerdo para el pago de los 10 millones que debe
21 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.El Hotel Balneario de Guitiriz se ha visto obligado a presentar el concurso, tras intentar, sin éxito, alcanzar un acuerdo con sus acreedores en la fase de negociaciones del preconcurso. La documentación fue entregada el martes en los juzgados lucenses y queda pendiente el auto con la declaración oficial de concurso y el nombramiento del administrador que llevará las riendas del establecimiento de hostelería en los próximos meses. Fuentes consultadas señalaron que el pasivo de la empresa, que cumple este año el décimo aniversario desde su reapertura, ronda los diez millones de euros. Debe a entidades financieras y a proveedores.
La dirección de la firma comunicó ayer a los representantes de los trabajadores que había presentado la documentación del concurso y que estaban a la espera del nombramiento del administrador concursal para conocer cómo quiere actuar. La plantilla, integrada por unas sesenta personas, recibió la noticia con preocupación ante la incertidumbre que se cierne sobre su futuro. Los trabajadores llevan meses cobrando sus salarios con retrasos.
El Balneario de Guitiriz presentó preconcurso de acreedores en julio pasado. Según comunicó el director, Carlos Marina, a la plantilla en octubre, la decisión fue adoptada después de que algún acreedor iniciara acciones judiciales para reclamar la deuda pendiente, lo que pudiera haber supuesto el bloqueo de las cuentas del establecimiento. De esa forma, la empresa se garantizaba poder seguir en funcionamiento y pagar las nóminas. Con esta decisión, la del preconcurso, también se evitaba que algún acreedor pudiera instar el concurso necesario.
Sin acuerdo posible
En la reunión de octubre con los representantes de los trabajadores -en el comité están representados Comisiones Obreras y la CIG- el gerente había mostrado su convencimiento de que era posible un acuerdo con los acreedores, que finalmente evitaría el concurso.
El balneario es propiedad de la familia coruñesa Conde Medín, que gestiona directamente las instalaciones desde hace unos dos años. En ellas invirtieron una importante cantidad de dinero. Tienen otras propiedades en Guitiriz.
El descenso en el número de huéspedes y del gasto medio por cliente figuran entre las razones que han llevado al emblemático establecimiento a la situación actual. El Balneario de Guitiriz reabrió en el 2003 de la mano de la cadena Hesperia. El hotel ocupa el edificio antiguo, que fue sometido a una importante reforma, después de permanecer cerrado durante décadas. La zona termal es nueva. Fue construida en el año 2003 sobre la base de un establecimiento que obtuvo oficialmente el reconocimiento de sus aguas en 1902. El complejo está formado por un hotel, un centro termal y un campo de golf de nueve hoyos, inaugurado en el 2002. Los propietarios también restauraron y recuperaron una mezquita levantada durante la Guerra Civil.
Las piscinas termales permanecerán cerradas por mantenimiento entre los días 16 y 20 de diciembre. La decisión fue adoptada antes de que trascendiera la presentación del concurso de acreedores.