Alimentos Lácteos se hizo cargo de la planta de Pascual, en Outeiro de Rei, a finales del 2009. La propuesta de este grupo de cooperativas, vinculadas al PP y capitaneadas por Eugenio Montero, presidente de Arzuana y concejal en Touro; y de Arcadio López González, de Gancobre (Pastoriza), exalcalde de esta localidad, adelantó por la derecha al proyecto liderado por Feiraco y del que habían formado parte. Pascual le alquiló la planta -con opción de compra- de forma inesperada a Alimentos Lácteos, que recibió el apoyo de la Xunta, a través del Igape y de Xesgalicia, durante los tres años que estuvo en funcionamiento.
Desde el principio los accionistas mayoritarios, Montero y López, pusieron todo tipo de trabas a que entraran más cooperativas en el proyecto, lo que supuso el cese del entonces gerente, Roberto Casas, que fue quien colocó en el mercado las marcas Deleite y Muuu.
A partir de ahí, la firma emprendió una huida hacia adelante que finalizó el pasado 27 de mayo con la presentación del concurso de acreedores. La actividad en la planta había cesado meses antes, después de que las cooperativas dejaran de entregar leche por impagos.