La recesión y los turistas

ECONOMÍA

24 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El Gobierno ve un futuro esperanzador en la décima de crecimiento que estima el Banco de España para el tercer trimestre de este año. Yo, sin embargo, veo el balance de los nueve primeros meses de este 2013. ¿Y cómo es? Los datos acumulados sugieren que la evolución del PIB este año no parece que vaya a ser mucho mejor que la del pasado ejercicio. A no ser que en el último trimestre las cosas den un giro radical, cerraremos con una caída anual cercana al 1,5 % mientras el pasado año lo hicimos con un -1,6 %. Y en el empleo el descenso de este año no va a ser mucho mejor que el del 4,8 % registrado en el 2012.

Y, sin embargo, debemos alegrarnos porque esa décima nos permite -dicen- ver la luz y la salida del túnel. ¿Será esa luz la demanda externa? En absoluto. Todas las tasas de variación de la demanda externa que estima el Banco de España para los tres trimestres que llevamos del año son peores a las registradas en los mismos trimestres del 2012, y en lo relativo a las exportaciones eso es igualmente cierto. ¿De dónde sacar pecho? Solo en una caída de las importaciones que es la dura traducción de la depresión y la devaluación interna.

¿Estará la luz en la demanda interna? En este caso las tasas sí son mejores que el año pasado por estas fechas, aunque sea algo que solo cabe imputar al consumo estacional de la temporada turística. Es decir al consumo de los no residentes, porque nuestras familias y nuestras Administraciones están consumiendo cada vez menos. Fuera de la temporada alta turística la demanda y el consumo en España se enfrentan a la cruda realidad de un país en devaluación interna y desempleo masivo. El propio Banco de España no pronostica una recuperación sensible del consumo a corto plazo.

Me permito recordar a los que ven un futuro esperanzador en esa décima, que también en el 2011 crecimos una décima, para luego caer un 1,6 % en el 2012. No sería la primera vez que confundiésemos una décima positiva con una salida en falso de la recesión. Y no veo en los datos del Banco de España (salvo el turismo) nada que impida que eso nos vuelva a suceder.