El presidente de los sabios de las pensiones dice que no bajarán

m. j. alegre MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

Pérez Díaz, ayer junto a Chaves, en su comparecencia ante la Comisión del Pacto de Toledo.
Pérez Díaz, ayer junto a Chaves, en su comparecencia ante la Comisión del Pacto de Toledo. k. rodrigo < / span>efe< / span>

El PSOE propone un impuesto a las rentas altas para financiar el sistema

19 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Víctor Pérez Díaz, el presidente de la comisión de sabios que ha elaborado el informe sobre el factor de sostenibilidad de las pensiones, rindió cuentas ayer ante la Comisión del Pacto de Toledo. La mayoría parlamentaria la tiene el PP, pero las voces críticas a un trabajo directamente encargado por el Gobierno predominaron entre las tomas de posición de los grupos.

Aunque Pérez Díaz exigió a los diputados «más rigor» en sus juicios, reconoció que los expertos «no miraron con lupa» el posible impacto acumulado de su propuesta con el proceso actual, es decir, con la reforma del Gabinete Zapatero que entró en vigor el 1 de enero. También admitió que será la Seguridad Social la que ponga los números en los cálculos definitivos.

Matizó el experto que el documento presentado pretende ser «un mecanismo de alerta» ante el envejecimiento de la población y la necesidad de preservar el equilibrio de las cuentas públicas. A la hora de aplicar las propuestas formuladas «me lo pensaría mucho», concedió. No obstante, rechazó que el documento vaya a generar alarma social entre los pensionistas actuales y futuros, como advirtió la portavoz socialista Isabel López i Chamosa.

El factor de sostenibilidad «no supondrá una bajada de las pensiones, que se prevé sigan creciendo en términos reales a largo plazo», insistió Pérez Díaz.

El representante más cualificado de los expertos se enfrentaba a una audiencia poco propicia. Los representantes de la mayoría de las fuerzas políticas, que tienen a gala haber sacado adelante anteriores reformas del sistema de pensiones por consenso, no están conformes con el procedimiento ahora seguido, y formularon abundantes objeciones. Con excepción del PP, fue unánime la censura a la celeridad en la ejecución del informe. «No hemos tenido prisa, hemos querido trabajar rápido», refutó Pérez Díaz. «Por lo que a mi respecta, este informe no es de gentes apresuradas con conocimientos infusos, ni el Espíritu Santo nos ha impresionado con su presencia milagrosa en las reuniones», ironizó.

Frente a la tan abundantes críticas, ¿por dónde puede ir el deseado consenso? El portavoz socialista de Economía en el Congreso, Valeriano Gómez, aseguró ayer en Santander que no hay ninguna vía de entendimiento en la reforma de las pensiones si la posición del Gobierno es la propuesta del comité de expertos. El PSOE propone utilizar los 67.000 millones de euros del Fondo de Reserva de las pensiones para cubrir las necesidades de gasto actual que exceden de los ingresos por cotizaciones sociales y, para el medio y largo plazo, crear un «impuesto especial directo que gravará las rentas altas» como fuente adicional de recursos para la Seguridad Social.

Mientras, Bruselas ha decidido dejar libertad a España para que decida la forma de garantizar la sostenibilidad futura del sistema de pensiones. Ya no le impone ir aumentando la edad de jubilación más allá de los 67 años en función de la esperanza de vida, sino que también le abre camino a que opte por el ajuste de la prestación de jubilación. Ambas opciones se reflejarán en el texto definitivo de las recomendaciones que se abordará esta misma semana en el Eurogrupo y el Ecofin.