Greenpeace alerta del impacto de la desintegración de la actividad artesanal
07 may 2013 . Actualizado a las 11:32 h.La mitad del empleo destruido en el sector pesquero en España en el quinquenio 2006-2011 estaba en Galicia, según los datos de un informe presentado ayer por la organización ecologista Greenpeace, que destaca el impacto de ese proceso en el perfil sociodemográfico de las localidades costeras gallegas.
Según el estudio, de más de cien páginas, basado en fuentes estadísticas oficiales y que puede descargarse en el enlace http://www.greenpeace.org/espana/es/reports/Pesca-sostenible/, la pesca gallega destruyó en esos cinco años un total de 3.575 puestos de trabajo, prácticamente la mitad de los 7.200 perdidos en el sector en toda España en esos años.
«La destrucción de empleo está impactando fuertemente sobre las comunidades pesqueras rurales», donde, según explica Greenpeace, estaban radicados el 83 % de los puestos de trabajo que se perdieron. «Este resultado es generalizado por zonas geográficas, pero afecta de manera especial a Galicia», indica la organización.
Las estadísticas lo confirman. Si la pesca gallega perdió un 13?% de ocupados entre el 2006 y el 2011, la media general de todos los sectores en la comunidad ronda el 13 %, siguiendo los datos de afiliación a la Seguridad Social del mismo período. La diferencia se explica por la gran dependencia de Galicia de la pesca artesanal, la que más está sufriendo ese proceso. Si en España el empleo en la bajura representa el 45 % del total, en Galicia supone cerca del 53 %.
Precisamente, Greenpeace cree que la desintegración de la pesca tradicional, la que mejor garantiza la sostenibilidad de los recursos, está poniendo en peligro la conservación de los océanos. Según el director ejecutivo de la organización, Mario Rodríguez, quien presentó el informe Empleo a bordo en el buque Artic Sunrise en el puerto de Barcelona, la flota artesanal se ha reducido un 34?% desde 1995 mientras la capacidad de la flota industrial crecía un 70 %.
Una situación «dramática e intolerable» para Greenpeace, que alerta de que la política pesquera que defiende España es responsable de la pérdida de más de 50.000 empleos en los últimos dos decenios, y que, de no cambiar, provocará la destrucción de otros 14.000.