El Eurogrupo dice que España tiene potencial para volver a ser uno de los motores del euro

m. M. redacción / la voz

ECONOMÍA

Cree que puede «dar la sorpresa» y protagonizar una recuperación económica «muy fuerte»

12 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Apenas 24 horas después de que la Comisión Europea arrojara su particular jarro de agua fría sobre el optimismo del Gobierno de Rajoy asegurando que la recesión podría alargarse hasta bien entrado el 2014, el polémico presidente del Eurogrupo, el holandés Jeroen Dijsselbloem, se descolgó afirmando que España tiene potencial para «dar la sorpresa», protagonizar una recuperación económica «muy fuerte» y convertirse en uno de los principales «motores económicos» de la zona euro.

Otra vez la ceremonia de la confusión a la que nos tiene acostumbrados Europa.

El también ministro de Finanzas holandés advirtió, no obstante, que España aún se encuentra inmersa una profunda recesión. Pero, aun así, matizó, las bases para la recuperación económica están sentadas. Algo que, dijo, también puede aplicarse al conjunto de Europa. Con todo, Dijsselbloem no cuenta con que la economía empiece a levantar cabeza, al menos, hasta finales de año.

Prórroga a Irlanda y Portugal

También dejó caer el holandés que es muy probable que los ministros de Finanzas del euro acuerden hoy en Dublín concederles siete años más a Irlanda y Portugal para que devuelvan el dinero de los rescates. La cita servirá también para que los lusos pongan sobre la mesa los ajustes destinados a reemplazar a los anulados por su Tribunal Constitucional.

El oro de Chipre

Y mientras, en Chipre, las cuentan no cuadran. Lo reconoció ayer el Ejecutivo de la isla al admitir que su país precisa 23.000 millones de euros, cifra que incluye los 10.000 millones que le va a prestar la troika. Los otros 13.000 habrá que buscarlos debajo de las piedras. Recortando gastos a diestro y siniestro y, cómo no, subiendo impuestos. No queda otra que rascarse el bolsillo. La cifra es casi el doble de lo que Chipre había dicho que aportaría a su propio rescate, unos 7.000 millones. Entre sus planes está vender hasta 400 millones de euros de sus reservas de oro, el 72 % de las que atesora su banco central. Eso supone que Nicosia podría llegar a poner en el mercado 10 toneladas del preciado metal, perspectiva que ya ha debilitado su cotización en los mercados.

Con todo, la mayor parte del dinero se cubrirá con la polémica quita a los grandes depósitos. Ese tajo a las cuentas de más de 100.000 euros aportará unos 11.000 millones.

«No me extrañaría que España sorprendiera con una recuperación muy fuerte»

Jeroen Dijsselbloem