El presidente de la entidad resalta que el país será una de las economías mundiales «más dinámicas»
22 mar 2013 . Actualizado a las 00:20 h.BBVA invertirá 3.500 millones de dólares en México durante los próximos cuatro años, concretamente entre 2013 y 2016, destinados a desarrollar un nuevo modelo de distribución multicanal, a mejorar el servicio y a desarrollar productos de mayor valor añadido para los clientes del grupo en el país. Es la mayor inversión que BBVA Bancomer ha llevado a cabo en su historia, y la anunció este jueves el presidente de la entidad de crédito, Francisco González, acompañado del presidente de México, Enrique Peña Prieto, en la residencia oficial Los Pinos de la capital azteca.
González expresó su convicción de que México «se va a desarrollar como una de las economías más importantes y dinámicas del mundo», hasta el punto de que liderará el crecimiento del planeta. «A lo largo de los años, y en entornos difíciles -evocó-, este país ha demostrado siempre gran resistencia y fortaleza».
También ha explicado que este desembolso se enmarca en la estrategia global de futuro que permitirá construir «un nuevo BBVA y un nuevo grupo Bancomer». BBVA invirtió por primera vez en México a principios de los años 90, en una de sus primeras apuestas por la internacionalización.
Líder local
BBVA Bancomer «es el primer banco, y el más comprometido con el país», añadió el presidente del grupo bancario español. La entidad mexicana tiene casi 21 millones de clientes, ocupa a 38.000 empleados y lidera la mayor parte de los segmentos del mercado, con cuotas que van del 20% al 30%. De la inversión ahora anunciada, cerca de 1.300 millones se van a destinar a renovar las 1.800 sucursales, mientras otros 1.500 millones permitirán construir una nueva infraestructura tecnológica. Los 700 millones restantes financiarán centros operativos y una sede corporativa en Ciudad de México.
En 2012, Bancomer aportó el 25% de los ingresos de grupo BBVA y se consolidó como el primer contribuyente a los beneficios. La franquicia en México presentó unos «sólidos» indicadores, tanto en actividad como en ingresos, según señaló la entidad. La inversión crediticia creció un 6,7% a tipo de cambio constante y los recursos de clientes, un 4,8%.
El beneficio atribuido fue de 1.821 millones de euros, con aumento del 4% en euros constantes.