Gobierno y partidos de Chipre elaboran un plan alternativo para cubrir los 5.800 millones exigidos por el Eurogrupo

Efe

ECONOMÍA

La idea es que se reduzca o incluso elimine el gravamen a los depósitos y a cambio se reúnan los 5.800 millones a través de fuentes alternativas

20 mar 2013 . Actualizado a las 14:49 h.

El presidente de Chipre, Nikos Anastasiadis, y los líderes de los partidos políticos han decidido esta mañana elaborar un plan «B» para buscar vías alternativas para cubrir la aportación de 5.800 millones de euros exigida por el Eurogrupo a cambio del rescate.

El portavoz del Gobierno chipriota, Jrístos Stilianidis, anunció al término de la reunión que se ha formado una comisión técnica encargada de elaborar los detalles.

Según informaciones de la cadena de televisión pública RIK, la idea es que se reduzca o incluso elimine el gravamen a los depósitos y, a cambio, se reúnan los 5.800 millones a través de fuentes alternativas, como los fondos de la Iglesia o de la Seguridad Social. En esta reunión participaron los dirigentes de todos los partidos representados en el Parlamento de Chipre -el conservador DISY, el comunista AKEL, el centrista DIKO, el socialdemócrata EDEK, el centroderechista EVROKO y el partido ecologista.

En el Banco Central, los líderes de las formaciones políticas se reunirán con representantes de la troika, informó la televisión pública. Anastasiadis se había reunido a primeras horas de la mañana con el arzobispo de Chipre, Chrisóstomos II, quien, al término de la reunión, señaló a RIK que la propiedad de la iglesia de Chipre está a disposición del Estado. Podemos hipotecar toda esta propiedad y del dinero que saquemos comprar bonos del Estado para salvar el sistema bancario del país», afirmó Chrisóstomos. A la pregunta de si la Iglesia tiene un techo de contribución el arzobispo contestó: «Como todos saben la propiedad de la Iglesia es inmensa». El Eurogrupo ha exigido a Chipre que aporte 5.800 millones de euros a cambio de un rescate de 10.000 millones de euros. La alarma saltó el pasado sábado, cuando los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro acordaron un rescate de 10.000 millones de euros para Chipre, pero a cambio de la ayuda multimillonaria de sus socios, el nuevo Gobierno de Nicosia decidió cruzar una línea roja y aceptar una quita a todos los depósitos. El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, informó tras más de diez horas de negociaciones que el rescate incluye «ambiciosas medidas» en el ámbito de la consolidación fiscal, las reformas estructurales y las privatizaciones, así como «acciones determinantes» para salvaguardar la estabilidad financiera.

Después de la indignación provocada dentro y fuera del ámbito chipriota, el Eurogrupo volvió sobre sus pasos el lunes y suavizó el feroz rescate, salvando a los pequeños ahorradores.