La solicitud de concurso de Reyal Urbis es la segunda mayor suspensión de pagos de la historia empresarial española, con una deuda de 3.600 millones, tras la de Martinsa-Fadesa. El que sigue es el ránking de los principales concursos de acreedores registrados en España:
Martinsa-fadesa
La mayor de la historia. La compañía presentó la suspensión de pagos en el verano del 2008 con una deuda de 7.100 millones de euros. Este gigante inmobiliario, surgido de la opa de Martinsa sobre Fadesa en el 2007, acudió al concurso voluntario de acreedores ante la falta de financiación y las graves dificultades de tesorería por las que atravesaba. Su principal accionista es Fernando Martín, que también se declaró en suspensión de pagos a título personal y a quien el juez adjudicó un sueldo de 75.000 euros al mes. En el 2011, la empresa salió del concurso de acreedores después de que su plan de pagos y de de viabilidad fueran apoyados por dos terceras partes de los acreedores. El convenio permite a Martinsa-Fadesa abonar su deuda financiera, cifrada entonces en 5.721 millones, en un máximo de diez años, a partir del 2012.
Hábitat
Una deuda de 2.840 millones. La inmobiliaria Hábitat se declaró insolvente en diciembre del 2008 con una deuda de 2.840 millones de euros tras convertirse en la quinta promotora española. También en este caso, la ambición por crecer -mediante la compra de Ferrovial Inmobiliaria- disparó su deuda. El pinchazo de la burbuja inmobiliaria paralizó las ventas y devaluó sus activos. En abril del 2010 superó la suspensión de pagos tras aprobarse el convenio de acreedores de la empresa.
Sacresa
Un año en concurso. La familia Sanahuja, que llegó a tener más del 80 % de Metrovacesa, presentó en julio del 2010 concurso de acreedores para la inmobiliaria Sacresa con 2.635 millones de deuda. En junio del 2012 superó el concurso tras lograr el apoyo de los acreedores a su plan de pagos con una quita sobre el pasivo y la cancelación de gran parte de la deuda a cambio de la entrega de activos.
Nueva Rumasa
La historia se repite. En el 2011, el grupo Nueva Rumasa, propiedad de la familia Ruiz-Mateos, presentó concurso voluntario para sus empresas, entre ellas Cacaolat, Duhl, Carcesa, Queserías Menorquinas y Trapa. En septiembre de ese año, la familia Ruiz-Mateos vendió Nueva Rumasa a una sociedad de Ángel de Cabo, liquidador de Marsans y actualmente en prisión.
Grupo marsans
La caída de Díaz Ferrán. En junio del 2010, ahogados por las deudas y con el grupo Marsans al borde de la quiebra, Gerardo Díaz Ferrán, presidente de la CEOE, y su socio Gonzalo Pascual anuncian la venta de la empresa a la sociedad Posibilitumm Business, propiedad de Ángel de Cabo. Al final de ese mes, un juzgado de Madrid declara a Viajes Marsans en concurso necesario de acreedores. Díaz Ferrán y De Cabo están en la cárcel, acusados de alzamiento de bienes, insolvencia punible, blanqueo de capitales, estafa y falsedad documental.