Galicia inicia el año encaminada a batir el récord de 300.000 parados

Mario Beramendi Álvarez
mario beramendi SANTIAGO / LA VOZ

ECONOMÍA

Los empresarios gallegos prevén un primer semestre con una alta destrucción de empleo

02 ene 2013 . Actualizado a las 15:14 h.

La profunda recesión económica que sacudió la economía gallega en el 2012 se mantendrá, al menos, durante el primer semestre de este año. Esa es la previsión de los empresarios gallegos, que vaticinan dos primeros trimestres en los que la comunidad sufrirá una alta destrucción de empleo -quizá algo menos intensa a la de finales del 2012-, pero que la abocará a situarse en el fondo del pozo, en el peor estadio de la crisis.

Traducido a cifras, y tomando como referencia la encuesta de población activa (EPA), esto significa que Galicia llegaría al mes de junio batiendo el récord de los 300.000 parados, unos 36.000 más de los que el INE estima que hay ahora. Esto supone que la tasa de paro, en el primer semestre del 2013, saltaría del 20,1 % actual a casi el 22,5 %, punto y medio por encima del nivel previsto por la Xunta en los presupuestos del 2013 (del 21 %), aunque manteniendo un diferencial favorable de entre tres y cuatro puntos respecto a la media española. Aunque la Confederación de Empresarios de Galicia no ha hecho pública ninguna previsión, la CEOE, para el conjunto de España, ya ha advertido que la crisis ha entrado en una «espiral» que conducirá a los seis millones de parados, es decir, una tasa del 26,3 %.

Una previsión que comparten los directivos de empresas gallegas consultados por este periódico. «Al menos para el primer semestre, no existen perspectivas de crecimiento y eso no es bueno; no hay indicios que apunten a una mejora. Habrá una mayor presión fiscal y un menor consumo», precisa José Luis Antuña, director general de Feiraco.

Ecuador de la legislatura

Un escenario similar al que dibujó el propio Feijoo en su discurso de investidura, a finales del pasado año, quien llegó a situar el posible cambio de tendencia pasado el ecuador de la legislatura, en el 2015. Con el grifo del crédito cerrado, con las restricciones en el presupuesto público y con la fuerte contracción del consumo, la economía parece dar vueltas sobre una rueda, sin visos de hallar la salida. Antonio Fontenla, presidente de los empresarios gallegos, augura un primer semestre muy difícil y tiene dudas sobre lo que pueda ocurrir en la segunda mitad del año. «Quizá la economía toque fondo y protagonice un crecimiento mínimo, plano, insuficiente para dinamizar la actividad y generar empleo neto, pero que se podría interpretar como un avance mínimo hacia un cambio de tendencia», apunta Fontenla. Hasta el momento, la grave crisis económica ha condenado a la comunidad gallega a contar con un nivel de empleo similar al que había hace diez años. Una destrucción de ocupados que se ha cebado, fundamentalmente, con los jóvenes de 18 a 35 años, en lo que constituye, para muchos, un drama generacional. Las perspectivas del 2013 que manejan los empresarios gallegos, al menos por ahora, no dibujan un panorama que permita tapar en parte esa tremenda huella que deja la recesión.