Cajas: dando lecciones a los alemanes

ECONOMÍA

14 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Unos campeones. Con medio sistema financiero español rescatado, nos presentamos en Bruselas reclamando que los bancos regionales y las cajas de ahorros alemanas entren por el mismo aro que nosotros. Y, una vez más, nos quedamos con dos palmos de narices (neoliberales) con la respuesta: haz lo que te digo, no lo que yo hago.

Nuestros estrategas del Banco de España, CECA y compañía tuvieron en su momento la revelación de que el modelo alemán de cajas no valía para España y se pusieron manos a la obra: forzar fusiones interregionales, transformarlos en megaentidades bancarias de ámbito español y -sin que nadie lo exigiera- someter a test de estrés del 9 % de capital a todas las entidades. Mientras tanto, en Alemania se mantenían en sus trece: cajas públicas de ámbito regional y solo supervisadas por su Banco Central.

Y en la noche del miércoles dejaron claro que así piensan seguir. Eso sí, como nosotros en vez de seguir su hoja de ruta, vamos de más liberales que Hayek nos dicen que, primero, las que tuvieron que ser rescatadas (como Novagalicia), por dar negativo en los test en las que las metimos, las supervisará el BCE y la ABE (poco pinta el Banco de España). Y, segundo, el resto (Kutxabank, Caixabank?) como controlan bancos de ámbito suprarregional y sistémico (más de 30.000 millones de capital), también. Lo que se dice morir de listos.

En Alemania seguirán con 360.000 empleados en cajas que fiscalizan solo ellos y nosotros con 115.000 trabajadores en peligro en cajabancos que supervisará el BCE, datos del 2011 que tomo del Grupo Europeo de Cajas de Ahorros (www.esgb.eu). Ellos por debajo del listón de 30.000 millones y nosotros orgullosos de haber pasado de 45 entidades con una media de 30.000 a apenas 12 con una media de 100.000. Nuevo bingo.

Más diferencias. Ellos, aún si fuese verdad lo que se afirma en un diario de la capital (que sus entidades están «cargadas hasta las cejas» de basura tóxica), decidirán el listón de solvencia y pondrán fondos públicos alemanes para su saneamiento y continuidad como tales. Mientras, nosotros, que en lo tóxico somos unos campeones, las ponemos en bandeja para su liquidación o compra por un euro.

Me temo que la CECA y el Banco de España (con buena parte de nuestros expertos y hombres de Estado) han trabajado en una hoja de ruta inversa a la que ahora tendría homologación alemana: entidades públicas pequeñas y de escala regional. Nada de trocear lo demasiado grande para quebrar (Bankia y olé), nada de regresar a un pasado territorializado. Eso sí, una hoja de ruta consistente en sanear con dinero público y alimentar luego a los tiburones, que nos lo agradecerán. Un ejemplo de manual de captura del regulador por los mandarines supervisados.

Tiene tela que los queramos convencer de su error. Mientras tanto, empresas alemanas como Siemens o Dachser (en nada ajenas a su intocable sistema financiero regional) vienen de compras por España. Y nosotros intentando convencerlos de lo poco liberales que son en esto de las Cajas. Impresionante.