Ramona Rodríguez dejó de trabajar hacer once años para dedicarse las 24 horas a su hijo con parálisis cerebral
05 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Ramona dejó de trabajar hace once años para dedicarse las 24 horas a su hijo, afectado por un derrame cerebral que lo dejó sin poder hablar, andar o controlar los esfínteres. Con la reforma de la Ley de Dependencia tiene que pagar por su cuenta la cotización a la Seguridad Social que hasta el momento sufragaba el Estado. Ha decidido no hacerlo y pasar a engrosar la cifra de parados. «No me compensa pagar 170 euros de 268 que recibo por cuidarlo», asegura esta ourensana a la que aún le faltan siete años por cotizar para tener derecho a su jubilación. «Al paso que van las cosas igual pago para nada porque están acabando con todo, es una vergüenza, y ¿quién me asegura que cobraré la jubilación?», se pregunta. Ramona prefiere ahorrar esos euros porque está segura de que «cuando falte, nadie va a atender a mi hijo por este dinero».