El banco malo se da de plazo hasta febrero para captar inversores privados que aporten hasta 500 millones
13 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El Gobierno ha vuelto a echarle un capote a Bankia, la entidad que recibirá el mayor volumen de ayudas públicas para cubrir un agujero que está siendo investigado en la Audiencia Nacional. Ayer, en Bruselas, y a preguntas de varios europarlamentarios (preguntaron insistentemente los nacionalistas catalanes de CiU), el ministro de Economía auguró que ese gigante financiero sobrevivirá a los vaivenes de la reestructuración: «Es una entidad importantísima en el sistema bancario español». Y negó toda posibilidad de cierre: «Bankia no se liquidará». Tampoco es ninguna gran novedad porque en los decretos que ha ido redactando el Gobierno -sobre todo el último, de agosto, con las condiciones para el rescate financiero- siempre se han ido estableciendo cláusulas que beneficiaban al banco presidido hoy por José Ignacio Goirigolzarri. Está considerada una entidad «sistémica» en España, de tal forma que su caída podría arrastrar a otras.
El ministro aseguró que tras el proceso de reestructuración (con el traspaso de activos al banco malo y la llegada de la ayuda financiera, por un máximo de 27.000 millones para este caso), el banco «estará en condiciones óptimas». De Guindos defendió a la vez al equipo que gestiona ahora Bankia, tras la dimisión en primavera de Rodrigo Rato. La actual dirección, tras la marcha del exministro de Aznar es «independiente y profesional», agregó.
En su misma comparecencia, ante la Comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo, De Guindos señaló los efectos positivos que tendrán este mes de noviembre tanto los planes de reestructuración de las entidades que recibirán ayudas como la absorción de activos tóxicos por el llamado banco malo, que comenzará a operar el 1 de diciembre, informa Efe.
«Tendremos un sistema financiero más saneado y en condiciones de dar crédito», afirmó tras asegurar que se ha mejorado «la claridad y la transparencia de las cuentas del sistema financiero español» gracias a las reformas que se están llevando a cabo.
Además, recordó que los resultados de las pruebas de resistencia de los bancos españoles llevados a cabo por los distintos actores internacionales oficiales e independientes han mostrado que «el 70 % del sistema bancario español es fundamentalmente sano».
Mientras, los directivos del futuro banco malo (la sociedad de gestión de activos Sareb) detallaron ayer que este organismo se da hasta febrero del próximo año para sumar a su accionariado a inversores extranjeros y aspira a lograr el objetivo de que aporten unos 500 millones de euros. Esta sociedad inmobiliaria (que captará los activos tóxicos de la banca rescatada, como Novagalicia) tendrá la mayoría de su capital en manos privadas, y el resto, del Estado.
El director general del FROB, Antonio Carrascosa, ha explicado que en un primer momento el banco malo necesitará unos 5.000 millones y sería una «magnífica noticia» que los inversores extranjeros aporten el 10 %.
Los 5.000 millones serán suficientes porque el FROB prevé que el tamaño de Sareb no superará los 65.000 millones, incluyendo los activos que las nacionalizadas transferirán en diciembre y los de los bancos con ayudas, que se traspasarán en febrero, informa Efe.