Feijoo elude pronunciarse sobre la posible venta a Citi de todo Itínere, aduciendo que no se la han comunicado aún
07 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Al menos a efectos oficiales, a la Xunta le cogió ayer un tanto en fuera de juego la posible venta a la estadounidense Citi de la parte del capital de Itínere, concesionaria de las autopistas gallegas AP-9, AG-55 y AG-57, que todavía no controla: un 46 % actualmente en manos de Novagalicia Banco, Sacyr, Liberbank y otros minoritarios. De hecho, su presidente, Alberto Núñez Feijoo, a preguntas de la prensa tras la reunión ordinaria semanal de su Gobierno celebrada en Santiago, dijo no tener datos al respecto. No obstante, aclaró que, como posicionamiento de partida, su Gabinete exigirá a la empresa que controle la autopista del Atlántico, sea cual sea, un escrupuloso cumplimiento de «todas» sus obligaciones como conservadora de la vía.
«A Xunta está moi interesada en saber os movementos accionariais e empresariais en relación coa AP-9. A concesionaria ten a obriga de comunicalos e, no momento en que se produzan, no suposto en que se produzan, pois a Xunta de Galicia formará opinión», zanjó la cuestión Feijoo en una primera valoración, para luego abundar: «De momento, non temos ningunha información de facer un cambio accionarial. Temos dereito a coñecelo con anterioridade e a opinar nese momento». «Xa lle digo -se apresuró a aclarar- que cumprir con rigor todas as obrigas do concesionario é a primeira esixencia do Goberno autonómico».
Entretanto, desde la oposición, los socialistas cargaron con dureza contra el presidente de la Xunta, pues, en expresión del portavoz del PSdeG en el Parlamento, Abel Losada, la salida de NCG de Itínere «compromete» el futuro de la AP-9 y constituye «a última mostra de fracaso de Feijoo na súa política do sistema financeiro galego».