Un estudio de los productores lácteos avisa de que el aumento de los gastos fijos ha puesto al 80 % de las explotaciones ganaderas gallegas a un paso de la suspensión de pagos
05 sep 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Ocho de cada diez ganaderías gallegas entrarán en suspensión de pagos durante el próximo trimestre si no logran mejorar sus índices de rentabilidad. El aumento desmesurado de los costes de producción, propiciado por el incremento de los precios de los piensos y demás productos destinados a la alimentación del ganado, y una evolución a la baja del precio de la materia prima en origen, provocará que más de 8.500 granjas gallegas no dispongan de efectivo suficiente para hacer frente a sus deudas.
Esta es la principal conclusión del estudio elaborado por la Organización de Productores Lácteos (OPL), para quienes el futuro del sector en Galicia resulta especialmente incierto si la situación no da un giro radical. «A desaparición de establos vai ser histórica, porque co que ingresan a maioría das granxas xa nin sequera poden pagar o que lles custa dar de comer ao gando. Cada vez máis explotacións teñen dificultades para encontrar quen lles venda o penso ou demais produtos necesarios para o funcionamento das granxas polo retraso que acumulan nos seus pagamentos», apunta José Agra Alvite, representante en Galicia de esta entidad que aglutina a un millar de ganaderos en España.
«Hai fábricas de penso que xa deixaron de servir a algúns gandeiros que teñen facturas pendentes e outro tanto fan as empresas de servizos con traballos sen cobrar dende hai máis dun ano», comenta Agra Alvite, para quien el sector ganadero sigue siendo, pese a todo, de los que registra una menor morosidad «o que pasa é que se non ingresamos non podemos pagar», se lamenta.
Dificultad para hacer frente a las facturas
Los responsables de ventas de varias fábricas de piensos reconocen la creciente dificultad de muchos de sus clientes para hacer frente al pago mensual de sus facturas. Una de ellas, con sede en Pontevedra, incluso asegura haber tenido que tomar la difícil decisión de dejar de servir a media docena de ganaderías. «En otras - argumentan- hemos llegado a un acuerdo para facilitar el pago de las facturas pendientes bien financiando la deuda o fraccionándola en varias mensualidades. Tampoco nosotros nos podemos permitir una cantidad elevada de impagados». Desde la Asociación Gallega de Fabricantes de Alimentos Compuestos se confirmaba hace unos días que la mayoría de sus asociados están realizando notables esfuerzos para colaborar con los ganaderos ante la difícil situación que atraviesa el sector.
Otro tanto se ven obligados a hacer las empresas de servicios al ganadero o los autónomos que realizan la mayoría de trabajos agrícolas en el campo gallego. «Dentro dunhas semanas imos empezar a recoller o millo de moitas explotacións que aínda non pagaron a sementeira feita no mes de abril ou incluso parte dos traballos do ano pasado. O normal sería non lle traballar máis, pero se non lles vou traballar esta vez, xa podo dar definitivamente por perdido o que me deben», concluye el responsable de una empresa de maquinaria de Santa Comba que teme que muchos productores no encuentren siquiera quien les realice el trabajo este año. «Ogallá me equivoque, pero vai haber fincas que queden sen recoller porque moitos non van poder pagar o que custan os traballos», concluye.
Paralelamente a esto, el precio de la leche en origen no deja de caer. Las cotizaciones medias durante el mes de julio, tal y como publicó ayer el Observatorio do Sector Lácteo de la Xunta, fueron de 28,42 céntimos por litro, 0,23 céntimos menos que las registradas durante el mes anterior. Se acumulan así nueve mensualidades consecutivas en las que el valor de la materia prima no ha dejado de caer, situándose ya en valores similares a los que registraba en el 2009.