Una ampliación del metro de Nueva York enfrenta a ACS y OHL

victoria toro NUEVA YORK / CORRESPONSAL

ECONOMÍA

Se acusan mutuamente de provocar 203 millones de pérdidas a su empresa común

16 ago 2012 . Actualizado a las 06:00 h.

Las obras de ampliación de la línea 7 del metro de Nueva York son el escenario de una encarnizada batalla legal entre dos constructoras españolas, ACS y OHL. Ambas se acusan mutuamente de ocasionar pérdidas de 250 millones de dólares (203 millones de euros) a la empresa común adjudicataria de la obra.

La noticia la publicaba ayer el The New York Times y en ella se hacía eco del preocupante, según el rotativo, endeudamiento de ACS, a la que calificaba como una de las mayores constructoras del mundo. Y en medio del texto, el periódico hacía alusiones a la mafia y recordaba algún capítulo de Los Soprano, la serie televisiva estadounidense sobre la mafia italoneoyorquina.

Las acusaciones entre ACS y OHL son por incumplimiento de obligaciones financieras. La compañía Judlau Contracting, de la que OHL posee el 51 %, es la socia de Dragados, filial a su vez de ACS, en la adjudicación de las obras de ampliación del metro neoyorquino valoradas en 8.250 millones de dólares.

Y Judlau Contracting acusa a Dragados de mala gestión en la construcción de los túneles bajo la ciudad que habría ocasionado las pérdidas de 250 millones a ambas. Pero a su vez, Dragados acusa a Judlau Contracting de incumplir sus obligaciones financieras en el acuerdo.

La disputa se resolverá en septiembre ante un tribunal de arbitrio. Y mientras tanto, la Autoridad Portuaria, dueña del metro de Nueva York, le ha dicho al The New York Times que «las disputas entre los socios adjudicatarios son irrelevantes para nosotros, siempre que las obras se ajusten al presupuesto y al calendario, que es exactamente lo que está sucediendo».