La directora del organismo, Christine Lagarde, subraya que «no hay mucho más que podría pedir a España» si estuviese en un programa de ayuda
01 ago 2012 . Actualizado a las 21:47 h.La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, ha descartado hoy un programa de rescate a España al subrayar que las autoridades «ya están realizando lo que recomendaríamos». Además, Lagarde ha afirmado que las tensiones financieras se deben a la «incertidumbre» en la zona euro. «Cuando vemos lo que España ha realizado y tiene voluntad de realizar no hay mucho más que el FMI podría pedir a España si estuviese en un programa» de ayuda, dijo Lagarde en un encuentro con un reducido grupo de periodistas.
No obstante, la directora gerente del Fondo reconoció que estas medidas «no están funcionando» debido a la «incertidumbre» sobre el rumbo de la eurozona y las «preocupaciones» de los inversores acerca de la falta de crecimiento en España. Asimismo, destacó el «serio proceso de auditoría» al que está sometido el sistema bancario español y consideró «adecuados» los 100.000 millones de euros comprometidos por los socios de la eurozona para recapitalizar la banca española.
En su última revisión de la economía española, el organismo internacional pronosticó una recesión más profunda en España en el 2012 y el 2013 con contracciones de la economía del 1,7 y 1,2 %, dos y seis décimas más, respectivamente, que en sus previsiones de abril. «Hay factores que están trabajando para que la economía española gane competitividad, pero a la vez elementos externos que nublan el horizonte como la incertidumbre de hacia dónde va la eurozona», explicó Lagarde.
Lagarde cree que estamos ante una «pérdida de confianza» en la economía a nivel mundial y no ve «una mejoría importante» en el corto plazo. «Lo que estamos viendo en este momento es claramente un declive de la confianza, el cual está claramente impulsado por una combinación de magros datos económicos y la reacción de los inversionistas a esta situación», señaló.
La directora gerente del FMI reconoció además que la zona euro no es el único problema de la economía mundial, ya que Estados Unidos enfrenta interrogantes importantes sobre el futuro de sus finanzas.
Jueves crucial
España se enfrenta a un jueves crucial en el que espera que el Banco Central Europeo concrete medidas para aliviar el acoso que sufre desde hace semanas en los mercados y que está complicando cada vez más su financiación, hasta el punto de que en algunos círculos se da casi por sentado que acabará pidiendo a sus socios europeos un rescate de su economía.
Dos de las opciones a las que se apunta, con la vista puesta en la reunión de mañana del BCE en Fráncfort, son la compra masiva de deuda en el mercado secundario y la concesión al fondo de rescate europeo de una licencia bancaria que le permitiría acceder a fondos del BCE. Alemania se opone a esta última opción. Y hoy lo dejó claro. «Éste no puede ser nuestro camino», dijo el vicecanciller y ministro de Economía, Philipp Rösler. «No queremos emprender el camino hacia una unión de la inflación. Ya hemos emprendido el camino hacia una unión de la estabilidad».