Un economista belga dirigirá a los «hombres de negro» de la troika en España

La Voz IÑAKI CASTRO / COLPISA

ECONOMÍA

Servaas Deroose, que lideró la troika en Grecia y fue el enviado especial de Bruselas a Italia, estará al frente de los inspectores del rescate bancario español

22 jul 2012 . Actualizado a las 21:48 h.

El apelativo de Cristóbal Montoro se hizo un hueco rápidamente en el vocabulario de la crisis, pero en Bruselas la ocurrencia no tuvo tanta gracia. En la capital comunitaria, los inspectores bautizados como los «hombres de negro» lucen un fondo de armario mucho más variado y defienden su papel como supervisores de los compromisos rubricados entre los países rescatados y sus rescatadores. «Solidaridad con responsabilidad» es el lema que se repite frente a la idea de gobiernos intervenidos por tecnócratas sin corazón. En el caso de España, la troika de vigilantes sí que responderá a otro de los estereotipos alimentados por la recesión. Con un economista belga al frente, gran parte del equipo de expertos procederá previsiblemente del Norte del continente.

A diferencia del resto de países rescatados, la troika que acudirá trimestralmente a Madrid tendrá un formato más amplio. La Comisión Europea, el BCE y el FMI -el trío habitual hasta ahora- contará también con el apoyo de la Autoridad Bancaria de la UE, un organismo con sede en Londres.

La misión se ha ensanchado por el carácter especial del salvavidas, centrado únicamente en el saneamiento del sector financiero pese a que el Gobierno también deberá volcarse en el cumplimiento del déficit. El grupo de especialistas gozará de poderes reforzados para visitar las entidades auxiliadas y recibirá información al minuto para realizar sus evaluaciones. El aprobado en estos exámenes será imprescindible para que se desembolsen los distintos tramos de las ayudas.

La Comisión, convertida durante la crisis en una especie de superministerio de Economía en la sombra, tendrá un papel primordial en el seno de la troika. Bruselas ha elegido a un economista muy experimentado para liderar a su delegación. Se trata de Servaas Deroose, director general adjunto en el departamento de Asuntos Económicos y Financieros encabezado por el comisario Olli Rehn.

Deroose también conoce de primera mano los problemas de España

El especialista belga, que trabaja en el Ejecutivo comunitario desde 1985, ha vivido la evolución de la crisis en primera persona. Fue el jefe de los «hombres de negro» en Grecia y el enviado de Bruselas a Italia cuando el país se asomó al abismo del rescate a finales del año pasado.

Las angustias del socio transalpino parecen de otra época, pero la caída de Silvio Berlusconi provocó una auténtico terremoto en los mercados.

Como sucede ahora con España, los intereses de la deuda italiana rondaron y superaron durante semanas la barrera del 7%, considerado el umbral del rescate completo. Deroose hizo frente a aquella situación como responsable de la coordinación macroeconómica y de las políticas fiscales dentro de su departamento. Titulado en Economía por la Universidad de Gante, su carrera en la UE le ha permitido participar tanto en el diseño de los criterios de convergencia para acceder al euro como en el posterior nacimiento de la moneda y su desarrollo. Incluso, ha escrito varios libros y artículos sobre la divisa común.

Deroose también conoce de primera mano los problemas de España. Hace escasos meses, el especialista belga dirigió el exhaustivo examen sobre los desequilibrios de la economía española, un análisis amparado por las nuevas reglas de gobernanza común que constató el elevado endeudamiento privado y las dificultades del sector financiero. Además, representó a la Comisión en las negociaciones del memorando de entendimiento que regula rescate. Luis de Guindos desveló que estas delicadas conversaciones se produjeron con la Eurocopa como telón de fondo, lo que permitió a los inspectores vivir la explosión de alegría por el triunfo de la selección.

El economista belga no estará solo en su tarea de supervisar las condiciones del salvavidas. Sus escuderos no se han confirmado, pero se habla de un núcleo duro de especialistas formado por dos alemanes y un holandés. Estos países, junto a Finlandia y Austria, defienden desde el inicio de la crisis una estricta receta basada principalmente en la austeridad y las reformas. Los tres expertos son altos cargos de la Comisión.

El holandés Gert-Jan Koopman es el único que no pertenece al departamento de Economía, sino al de Competencia liderado por Joaquín Almunia. Titulado en Economía además de en Latín y Griego, ocupa el puesto de director general de Ayudas Estatales.

Orden de detención

La labor de Koopman será fundamental porque vigilará que las inyecciones a los bancos respeten la normativa comunitaria. Para ello, las entidades deberán someterse a una profunda reestructuración que podría desembocar en alguna liquidación total. Los expertos germanos que se perfilan como posibles hombres de negro son Jürgen Kröger y Peter Weiss. El primero es el jefe de la Comisión en la troika de Portugal y conoce al dedillo la situación específica de cada país. Weiss, por su parte, dirige la unidad española en el departamento de Economía. En principio, todos ellos se desplazarán a Madrid a finales de octubre para evaluar por primera vez los progresos del Gobierno en el marco del salvavidas.

En Bruselas se opta por hablar con mucha cautela de los integrantes de la troika más allá de su cabeza visible. Una de las razones es la fuerte presión ciudadana que soportan estos inspectores, especialmente los enviados a Grecia. El propio Deroose fue amenazado por el principal sindicato policial heleno, que amagó con emitir una orden de detención en su contra por los duros ajustes exigidos.

El incidente más grave, sin embargo, lo sufrió en mayo Horst Reichenbach, jefe de un órgano creado por Bruselas para ayudar a Atenas a agilizar la llegada de fondos estructurales. Un grupo alemán de extrema izquierda quemó el coche de su esposa en su casa de Potsdam y arrojó pintura roja contra el inmueble.

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