La banca arrastra a la bolsa española a un nuevo mínimo tras caer un 1,11 %

EFE

ECONOMÍA

El IBEX incrementa las pérdidas desde principios de año a niveles de mayo del 2003

17 may 2012 . Actualizado a las 21:05 h.

Las dudas sobre la banca española y especialmente sobre el futuro de Bankia han provocado hoy un nuevo cataclismo en la bolsa española,, que tocó otro mínimo anual, mientras que la prima de riesgo escaló hasta acercarse de nuevo a los 500 puntos básicos.

Al cierre, el Ibex 35 cedió un 1,11 % y tocó un nuevo mínimo anual en 6.538 puntos, lo que incrementa las pérdidas acumuladas desde principios de año hasta el 23,68 % y lo sitúa a niveles de mayo de 2003.

Bankia, situada en el epicentro del sismo financiero, se convirtió en la protagonista absoluta de la jornada, con momentos de caída libre en los que llegó a perder casi un 30 %, aunque finalmente se dejó un 14 %.

A ello contribuyeron las llamadas a la calma que hicieron tanto desde el Gobierno como desde la entidad. En declaraciones a EFE TV, el nuevo presidente de Bankia, Jose Ignacio Goirigolzarri, apeló a la fortaleza y solvencia de la entidad para pedir la confianza de los clientes, que en los últimos días han retirado unos 1.000 millones de euros en depósitos.

También el Gobierno, a través del secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, ha defendido la solvencia de Bankia.

El desplome del banco, recientemente nacionalizado, extendió la incertidumbre en el resto del sector financiero, que cayó de manera generalizada ante las dudas del impacto que tendrá en sus cuentas la reciente reforma financiera y, en general, la recesión en la que está inmersa España.

El Banco Popular se dejó un 4,61 %, Bankinter un 4,43 %, Caixabank un 3,08 %, BBVA un 2,79 %, Banco Sabadell un 2,58 % y Banco Santander un 1,66 %.

El sector, inmerso en una dura fase de reconversión, podría recibir otra estocada esta misma noche de la mano de Moody's, que ya ha anunciado a las entidades la llegada de una rebaja masiva de las calificaciones de riesgo, similar a la que aplicó el pasado lunes a la banca italiana.

Las tribulaciones del sector eclipsaron el buen resultado que obtuvo el Tesoro en la subasta de bonos celebrada hoy, en la que cumplió sus objetivos de colocación, aunque tuvo que elevar la rentabilidad hasta un 50 %.

En total, el Tesoro ha colocado hoy 2.493 millones de euros, al límite del máximo previsto en la emisión -que oscilaba entre 1.500 y 2.500 millones de euros- en tres emisiones de bonos a 3 y 4 años, para las cuales la demanda conjunta de las entidades ha superado los 7.365 millones.

No obstante, ha tenido que aplicar un aumento en el interés aplicado a las emisiones que ha oscilado entre el 20 y el 50 por ciento, en función de los distintos plazos.

La subasta, en cualquier caso, no sirvió para extender la calma en el mercado secundario de deuda, que sigue inmerso en un clima de desconfianza por la crisis institucional de Grecia y la indecisión del BCE para salir en apoyo de la deuda española.

Hoy la prima de riesgo se acercó peligrosamente de nuevo a los 500 puntos básicos, pero no los llegó a rebasar. Cerró en los 490 puntos, con el interés del bono español en el 6,31 %.

Muchos analistas creen que mientras no supere el 7 por ciento, España se mantendrá alejada del riesgo de un rescate europeo, aunque el temor a que la intervención ocurra en el medio plazo planea desde hace días por los mercados.

Todo depende, en cualquier caso, de cómo se resuelva la crisis griega, porque un fracaso del país en alcanzar un consenso tras las elecciones del 17 de junio supondría su salida del euro y extendería la inestabilidad a otros países del sur de Europa, como España, según temen los expertos.