La crisis abierta por Argentina con la expropiación de YPF comienza a pasarle factura en forma de empresas que abortan sus planes de implantación. La primera en hacerlo público ha sido N2S, la tecnológica participada en un 20 % por Gamesa. Su director general y fundador, Francisco de la Peña, lo tiene claro: no se puede poner en riesgo el dinero de los inversores en un país que no da seguridad jurídica. Cree de que no serán los únicos y que habrá un efecto dominó.
-¿Sabe si otras empresas seguirán sus pasos?
-Pues sí. Me ha llamado un montón de gente diciéndome que va a hacer lo mismo.
-¿Qué compañías y sectores?
-No estoy autorizado a desvelarlo, pero nosotros estamos muy vinculados a la comunidad de start ups que están creciendo, muchas vinculadas al medio ambiente, a la tecnología de gestión de residuos, de gestión inteligente de la energía, de vehículo eléctrico, etcétera. Es un mercado global que está en expansión y si tienes escenarios mucho más estables, te vas a otros, no te vas a Argentina.
-Así que el país va a pagar esa decisión sobre YPF.
-Sí. Argentina siempre fue una gran promesa que de vez en cuando tiene crisis, catástrofes o errores brutales, como el de ahora. Hasta la semana pasada el país era superactractivo, pero ya no. No puedes invertir en un lugar donde cuando te das la vuelta te han echado, donde una señora hace una arenga en el Parlamento y tienes a tres gorilas en la puerta. No.
-¿Y ahora qué hará N2S?
-Ya hemos entrado en Brasil, Colombia, Perú y Jamaica. Argentina era el paso siguiente. Allí iría el centro de soporte 24 horas para toda nuestra red en Latinoamérica y la I+D. Plegamos velas e iremos a Chile y a reforzarnos en Colombia.