Las acciones de Repsol en la Bolsa de Madrid cayeron ayer de forma abrupta más de un 6 % (los títulos se han quedado en 16,4 euros) de tal forma que en solo una jornada bursátil la compañía que preside Antonio Brufau se ha dejado 1.300 millones.
En lo que va de año, las acciones de Repsol han caído más de un 30 %, en buena medida influidas por las noticias que se iban generando desde Buenos Aires ante la posible nacionalización de YPF.
Sacyr otra damnificada
La operación de expropiación de YPF afecta directamente a Repsol y de forma correlativa a uno de sus principales accionistas, Sacyr. La constructora tiene un 10 % de Repsol y es, junto a La Caixa, uno de los principales accionistas de la petrolera. Esa vinculación directa llevó ayer a que los títulos de la firma cayeran ayer casi un 6 % en la Bolsa de Madrid, otra mala noticia que se suma a la delicada situación en la que se encuentra Sacyr y que derivó en los últimos meses en la abrupta salida de su presidente, Luis del Rivero. A su vez, una de las sociedades a la que afecta esa mala marcha de Sacyr es NCG Banco, accionista de referencia en la constructora.