La luz subirá un 6 % con carácter retroactivo desde octubre del 2011

Manoli Sío Dopeso
M. Sío Dopeso REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

El Supremo ordena la refacturación, que afecta a 29 millones de usuarios

15 mar 2012 . Actualizado a las 21:33 h.

El Ministerio de Industria aún o tiene claro cómo va a hacer para subir el recibo de la luz con carácter retroactivo desde octubre del 2011 y acatar así una cadena de sentencias del Tribunal Supremo que anulan las dos últimas congelaciones del recibo eléctrico, la aplicada en octubre del 2011 (en víspera de las elecciones legislativas) y la del 1 de enero del 2012, con el Gobierno recién llegado al poder. «Estudiaremos el auto del Supremo y tomaremos una decisión lo más aceptable posible desde el punto de vista del consumidor», se limitó a decir ayer el departamento de José Manuel Soria. La papeleta que tiene por delante el Gobierno no es fácil de resolver, ya que acatar los dictámenes judiciales supone verse obligado a aplicar tres alzas sucesivas en el recibo de la luz: dos retroactivas (las de octubre y enero) y la que el propio Soria avanzó tras la revisión de tarifas que tendrá lugar el 1 de abril.

¿Por qué el Supremo ordena ahora subir la luz que no se pagó hace cuatro meses? La decisión viene a dar la razón a las compañías eléctricas, que acudieron al alto tribunal para denunciar la congelación de precios decretada por los distintos Gobiernos. A finales de diciembre, el Supremo había suspendido la bajada de peajes eléctricos en un 12 % aplicada por el Gobierno en octubre para forzar una congelación de la luz. Pero la resolución era solo de aplicación desde el 22 de diciembre, fecha en la que se conoció la decisión del tribunal. Ayer, en respuesta a sendas demandas presentadas por Iberdrola y Endesa, resolvió que la tarifa de último recurso (TUR), la parte de la factura que establece el Ejecutivo, debe volver a calcularse para el conjunto del cuarto trimestre del 2011. De esta forma, las eléctricas tendrán que refacturar tres meses enteros de luz a 29 millones de clientes, lo que, a la vista de que los peajes tienen un peso del 50 % sobre el recibo, supone una presión al alza del 6 % que los clientes no han pagado y deberían abonar ahora. La sentencia del Supremo reconoce un desajuste temporal de 904 millones correspondientes al 2011 y 116 millones correspondientes al 2012.