Zara abre en Nueva York su nuevo modelo de tienda, que experimentó en Marineda City

Sofía Vázquez. Nueva York ENVIADA ESPECIAL

ECONOMÍA

El presidente de la compañía afirma que la crisis no puede ser una excusa para no crecer

12 mar 2012 . Actualizado a las 22:57 h.

La crisis no puede ser una excusa para no crecer, ni para Inditex ni para España en particular, aunque el entorno económico sea difícil. «Lo que no hagamos ahora como país no lo podremos hacer dentro de dos o tres años». Así se expresó el presidente de Inditex, Pablo Isla, en Nueva York, donde el miércoles la compañía inaugurará una tienda de 3500 metros cuadrados en el corazón del mundo, en la Quinta Avenida de Nueva York.

Será una tienda «emblemática», «única», en la que Zara presentará una nueva imagen, totalmente diferente a la que se conoce hasta ahora, más natural. Será una gran boutique de boutiques, que se dispondrán en el interior de un establecimiento «acogedor» en el que trabajarán 450 personas y cuyos responsables han accedido al cargo por promoción interna.

Diáfana, pero acogedora, profundizando en la apuesta por la sostenibilidad, el nuevo concepto de Zara culmina un proceso que comenzó hace ya dos años, y que se fue definiendo en tiendas de Sídney, Melbourne, Taiwán, Oporto, Londres y también muy cerca de casa, en Marineda City, en A Coruña.

Será su séptima tienda en Nueva York y la quinta en la calle vertebral de la ciudad. Se ubicará enfrente a Tiffany, al lado de la cadena japonesa Uniqlo y enfrente de la catedral de San Patricio.

Pablo Isla no quiso pasar por alto que la compañía ha venido hasta Nueva York acompañada de proveedores gallegos como Cándido Hermida (muebles), Caamaño y Tresón. La responsable de la arquitectura del espacio es Elsa Urquijo, una profesional de A Coruña.

Por primera vez la compañía incorpora como tecnología el pago a través del móvil y de radiofrecuecia, lo que permitirá al cliente evitar el paso de la banda magnética por el terminal.

Inditex ha tardado en desarrollar el proyecto un año, prácticamente el doble de tiempo de lo que le ocupa en otros países. Pero Nueva York es una ciudad que exige todo tipo de permisos para la realización de cualquier instalación, y la nueva tienda requirió el cambio total de los 3.500 metros cuadrados que anteriormente ocupaba la NBA. La inversión total no fue desvelada por la multinacional. Sí recordó que, en contra de lo que es habitual, el local fue adquirido por 324 millones de dólares, cantidad que dará rentabilidad en diez años si se tiene en cuenta el nivel de alquileres que se paga en la esquina de la Quinta Avenida con la calle 52.

Justo enfrente de este buque insignia, la empresa que dirige Amancio Ortega dispone de otro Zara que en el segundo semestre se transformará en Massimo Dutti. Será el primer desembarco de esta cadena en Estados Unidos.